Washington. La confianza de los consumidores estadunidenses cayó en agosto a su nivel más bajo de los últimos seis meses, luego de que la preocupación por el alza en las infecciones de coronavirus y de la inflación frenó las perspectivas de la economía.
El grupo de estudios económicos Conference Board informó que el índice de confianza del consumidor mostró una lectura de 113.8 en agosto, frente a 125.1 en julio y el mínimo desde febrero.
La encuesta también evidenció que los consumidores eran menos optimistas sobre el mercado laboral, y se mostraban menos inclinados a comprar una vivienda y artículos de gran valor como autos y electrodomésticos importantes en los próximos seis meses.
El sondeo refuerza la opinión de que el gasto de los consumidores se enfriará en el tercer trimestre tras dos trimestres consecutivos de crecimiento de dos dígitos.
Aun así, un mayor número de consumidores planeó vacacionar, lo que indica que se está produciendo una rotación del gasto desde los bienes a los servicios, a medida que la actividad económica se normaliza tras las perturbaciones causadas por la pandemia de coronavirus.
El aumento del gasto en servicios, que representa el grueso de la actividad económica, debería mantener un piso para el gasto de los consumidores.
“Aunque el resurgimiento del Covid-19 y la preocupación por la inflación han mermado la confianza, es demasiado pronto para concluir que este descenso hará que los consumidores reduzcan por mucho su gasto en los próximos meses”, dijo Lynn Franco, directora senior de indicadores económicos de Conference Board de Washington.
Una encuesta de la Universidad de Michigan sobre los consumidores había mostrado un descenso de la confianza en agosto debido al alza en los precios de alimentos y gasolina, así como al resurgimiento de los casos de Covid-19, por la variante delta.
El llamado diferencial del mercado laboral del Conference Board, basado en opiniones de los encuestados acerca de si los puestos de trabajo abundan o son difíciles de conseguir, bajó a 42.8 este mes desde 44.1 de julio. La medida está correlacionada con la tasa de desempleo del informe de empleo del Departamento de Trabajo. Pese a la desaceleración prevista, la base del gasto de los consumidores sigue siendo sólida, pues los hogares cuentan con al menos 2.5 billones de dólares de excesos de ahorros acumulados durante la pandemia.
Las estimaciones para el crecimiento del producto interno bruto para el tercer trimestre se sitúan en torno a una tasa anualizada de 5 por ciento. La economía había crecido a un ritmo de 6.6 por ciento en el segundo trimestre.
Se dispara costo de casas
La encuesta de Conference Board también mostró un menor entusiasmo entre los consumidores por la compra de viviendas en los próximos seis meses, cuando hay un alza en los precios que está dejando fuera del mercado a algunos compradores primerizos.
La demanda de casas se disparó al iniciar la pandemia, pues los estadunidenses buscaban alojamientos más espaciosos para las oficinas y la educación en casa, pero la oferta se quedó muy rezagada, avivando el alza de precios de las viviendas.