Es hora de suprimir la “pulsión adultocéntrica”, dejar de decir que en las escuelas hay riesgo de contagios de Covid y preguntar a los niños su opinión porque, en realidad, ellos comprenden bien la situación y siguen las medidas sanitarias con rigor, afirmó Tania Ramírez, directora de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim).
Señaló que cuando se abrieron restaurantes y plazas comerciales, los adultos no reaccionaron como ahora en el inicio del ciclo escolar. Por el contrario, empezó la afluencia a los lugares públicos donde lo primero que hacen es quitarse el cubrebocas.
En conferencia organizada por El Poder del Consumidor, el director Alejandro Calvillo destacó que la pandemia de Covid-19 debe ser la oportunidad para fomentar la alimentación saludable en las escuelas, lo que no ocurrió antes, a pesar de lineamientos que prohíben y sancionan la venta de alimentos procesados y ultraprocesados con contenido alto en grasas, sal y azúcares añadidos.
Resaltó que antes del Covid-19, en México ya había una epidemia grave de sobrepeso, obesidad y diabetes. Incluso cuatro años antes la Secretaría de Salud había declarado la emergencia epidemiológica por esta causa. El coronavirus “desnudó” la situación de salud en el país que fue generada por una mala alimentación.
De ahí la importancia de que con el regreso a las actividades escolares presenciales se retome la estrategia de promoción de la alimentación saludable y se eliminen de los planteles los productos que favorecen el sobrepeso y la obesidad.
Fabio Gómez da Silva, asesor regional en Nutrición de las organizaciones Panamericana y Mundial de la Salud (OPS/OMS), comentó que el plan debe considerar la oferta de alimentos locales, en particular en comunidades que cultivan hortalizas, frutas, verduras; fomentar su consumo y eliminar las “prácticas de sabotaje” que pueden expresarse en publicidad de productos industrializados.
El especialista subrayó la importancia de disminuir el exceso de peso corporal que afecta a un tercio de los niños de cinco a 11 años de edad en México, pues como pasa con los adultos, esta condición física los coloca en un mayor riesgo de complicaciones graves por Covid-19.
Las personas con sobrepeso y obesidad tienen 74 por ciento más posibilidades de requerir hospitalización, 46 por ciento más de ir a una unidad de terapia intensiva y 48 por ciento más riesgo de morir a causa de la enfermedad.