Nueva Orleans., Al menos una persona murió y vastas zonas de Luisiana y Misisipi no tenían energía eléctrica ayer, mientras las autoridades advertían a los residentes de no salir a las carreteras llenas de cables eléctricos y escombros por el paso del huracán Ida, que seguía siendo una poderosa tormenta.
El gobernador de Luisiana, John Bel Edwards, señaló que no hay virtualmente nadie en el estado con electricidad y que muchos sistemas de agua no funcionan.
El servicio de emergencias 911 tampoco estaba disponible en Nueva Orleans tras el paso del potente huracán de categoría 4 en la víspera.
Edwards dijo a MSNBC que es probable que la cifra de muertes ascienda y afirmó en Twitter que el estado desplegó mil 600 personas para efectuar labores de búsqueda y rescate.
Biden declara estado de desastre
El presidente Joe Biden declaró el estado de desastre mayor en la zona y ordenó asistencia federal para fortalecer los esfuerzos de recuperación. Afirmó que “los estados trabajan con la Cruz Roja Americana, que ya ha abierto 50 refugios en las áreas afectadas de la costa del Golfo”.
Más de 5 mil 200 efectivos del ejército, la agencia federal de manejo de emergencias y la Guardia Nacional fueron desplegados en Luisiana, Misisipi, Texas y Alabama para atender la emergencia, informó el general Hank Taylor, alto funcionario del Pentágono.
Ida tocó tierra en un momento en que Luisiana enfrenta un repunte de infecciones por Covid-19 con unos 2 mil 450 pacientes hospitalizados. El huracán perdió parte de su fuerza mientras avanzaba por el suroeste de Misisipi ayer, pe-ro el sistema, degradado a tormenta tropical, podría seguir provocando graves inundaciones en la región, informó el Centro Nacional de Huracanes.
La llegada de Ida ocurrió 16 años después del día en que el huracán Katrina –una de las tormentas más catastróficas y mortales de la historia de Estados Unidos– golpeó la costa estadunidense del Golfo de México.