La Iglesia católica hizo un llamado a las autoridades para que el retorno a clases presenciales tenga una estrategia integral que disminuya al máximo los riesgos de contagios de Covid-19 y se privilegie la salud de estudiantes, profesores, personal de trabajo y padres de familia.
En el editorial del semanario Desde la Fe señaló que el debate en torno al regreso a clases no debe reducirse a un asunto político, sino que la prioridad debe de ser el bienestar de la niñez. “A casi 18 meses después de iniciada la pandemia, el gobierno de México impulsa el regreso este lunes de millones de niños y adolescentes a las aulas de forma presencial. Este año y medio ha tenido diversas afectaciones para los menores. De acuerdo con la Unicef, al menos uno de cada tres niños en edad de ir a la escuela en América Latina no pudo acceder a la educación a distancia mientras las escuelas permanecieron cerradas. El mismo organismo estima que al menos uno de cada siete niños y jóvenes vivió confinado en su hogar durante gran parte de 2020 y, como consecuencia, sufrió ansiedad, depresión y aislamiento”.
Reiteró que no se debe dejar atrás el riesgo que representa la pandemia, que en este momento tiene su tercera ola en el país, y que ha afectado “seriamente a los menores de edad.
Recordó que habrá alumnos que no volverán en igualdad de condiciones, de hecho, muchos simplemente no volverán.