San Cristóbal de Las Casas, Chis., Cientos de migrantes, la mayoría haitianos, que el sábado partieron en caravana de Tapachula hacia la frontera norte de México, reanudaron este domingo la caminata desde el municipio de Huixtla, donde pernoctaron.
A diferencia del sábado, cuando varios de ellos fueron reprimidos y golpeados por agentes de la Guardia Nacional (GN), el contingente, en el que van menores de edad, avanzó ayer sin mayores problemas rumbo al estado de Oaxaca, sobre la autopista costera que comunica a México con Guatemala.
El grupo, de unas 500 personas, llegó la tarde-noche de este domingo al municipio de Escuintla, ubicado a unos 70 kilómetros de Tapachula y a unos 200 de los límites con territorio oaxaqueño.
El Colectivo de Observación y Monitoreo de Derechos Humanos en el Sureste Mexicano (Comdhsm), integrado por una veintena de agrupaciones, denunció que el sábado por la tarde “los elementos de las fuerzas de seguridad formaron equipos antimotines para cerrar el paso y encapsular a la caravana; entonces detuvieron a varias personas haciendo uso excesivo e ilegítimo de la fuerza”.
Acusó que los migrantes “fueron dispersados, por lo que corrieron internándose en los montes o a través del río, otros siguieron avanzando sobre la carretera. Durante varias horas, bajo la lluvia y empezando la noche, el operativo continuó agrediendo y deteniendo a los integrantes de la caravana”.
El colectivo señaló que “a partir de las 16 horas (del sábado) se observó un creciente despliegue de fuerzas de seguridad, integrado por volantas y autobuses del Instituto Nacional de Migración (INM), patrullas de la GN y camionetas militares, a la altura de Chamulapa, municipio de Huehuetán”.
Agresiones
Posteriormente, las fuerzas de seguridad trataron de impedir el paso del contingente, lo que ocasionó que algunos de los extranjeros fueran golpeados con toletes o patadas cuando estaban tirados en el suelo, y al menos 40 fueron detenidos, por lo que el Comdhsm exigió a las autoridades mexicanas “alto inmediato a la violencia” en contra de los miembros de la caravana.
En un comunicado difundido ayer demandó que sean escuchadas sus peticiones, respeto a los procesos de regularización migratoria y/o solicitud de refugio, así como la garantía al acceso a derechos fundamentales como el trabajo, la alimentación y la vivienda, además de que se garantice su derecho a la libre circulación por el territorio nacional de las personas que cuentan con documentos para una estancia regular en el país.