Rogelio Franco Castán, preso por el delito de “ultrajes a la autoridad” en un penal de Veracruz, pidió a la Cámara de Diputados que acepte su protesta como legislador, desde su celda y por escrito, así como llamarlo a jurar personalmente el cargo.
No obstante, Sergio Carlos Gutiérrez Luna (Morena), presidente de la Mesa Directiva, informó que pidió un análisis a la dirección jurídica en San Lázaro para determinar si Franco es o no diputado en funciones.
En la sesión constitutiva de la 65 Legislatura, por acuerdo de los partidos, se leyó una carta del ex secretario de Gobierno con Miguel Ángel Yunes, donde resalta que tiene sus derechos políticos a salvo, “tal como se manifiesta en la constancia de asignación de diputaciones electas”, suscrita por el Instituto Nacional Electoral.
El presidente de la Mesa de Decanos, Augusto Gómez Villanueva (PRI), se declaró “de enterado” del contenido del mensaje; para el PRD, con ello Franco cuenta con fuero y “debe ser liberado inmediatamente por el gobierno de Cuitláhuac García”.
Incluso, cuando se eligió a la Mesa Directiva, el secretario de la Mesa de Decanos, Humberto Aguilar Coronado (PAN), cantó el nombre de Franco para que votara.
Aun así, Gutiérrez Luna insistió en esperar al análisis jurídico del expediente “del compañero” y sostuvo que, al tratarse de un asunto “sin precedente”, la decisión que se tome debe ser “con mucho cuidado”.