La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), sección 7, rechazó cualquier comparación con grupos de “ultraderecha golpista” y precisó que no se opone al inicio del ciclo escolar 2021-2022, “nos oponemos al retorno presencial a las aulas en este momento y en estas condiciones”.
En un pronunciamiento, se deslindó de “las perversas acusaciones que intentan vincularnos con los grupos de la ultraderecha golpista y su expresión abierta denominada Frenaa. Nuestro movimiento ha combatido en las aulas, las plazas y calles toda clase de la reacción y fascismo”.
Luego de que el viernes Andrés Manuel López Obrador no llegó a su conferencia matutina, en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, debido a que integrantes de la CNTE cerraron el paso al vehículo en el que se desplazaba, la sección 7 negó “categóricamente las imputaciones que los voceros de la autodenominada Cuarta Transformación le hacen al Movimiento Magisterial y Popular de Chiapas respecto al supuesto bloqueo y retención del Presidente.
“La permanencia voluntaria del Presidente en el punto de concentración fue parte de un plan de provocación para justificar la ofensiva contra el principal baluarte de la CNTE que se opone a la imposición de la reforma educativa peñista”.
Anunció que “en Chiapas iniciaremos el ciclo escolar bajo las modalidades con las que hemos laborado y acordado con los padres de familia desde nuestras escuelas”.
Exigió la “reinstalación de la mesa CNTE-AMLO, el respeto a las conquistas laborales, sindicales, profesionales y el descongelamiento de las plazas y reinstalación de los 33 compañeros del comité seccional, solución inmediata a la problemática de las cajas de ahorro y la restitución de la bilateralidad”.