En vísperas del regreso a clases presenciales, Nadine Gasman, presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), señaló que ésta es una “política necesaria y esencial”, tanto para los niños, niñas y adolescentes como para las madres, que durante todo este tiempo de pandemia se han convertido en maestras de sus hijos debido a las nuevas dinámicas que han impuesto las clases virtuales.
“Nos parece muy importante el regreso a clases, es algo que va a activar la economía, va a liberar el tiempo de las mujeres, lo que les va a permitir retomar sus labores de trabajo. Sabemos que muchas salieron del mercado de trabajo y que no han estado buscando activamente, porque se han quedado cuidando en casa”.
Gasman agregó que “el regreso a clases presenciales también es una política que es excelente para los niños, para su salud mental y la capacidad de socializar” en la escuela con sus compañeros, tras más de un año no acudir debido al Covid-19.
En el caso de las mujeres, expuso que eso les permitirá “liberación de su tiempo y disminución del estrés y cansancio”. Incluso antes de la pandemia, las mujeres dedicaban el triple de tiempo, en comparación con los hombres, a las tareas domésticas.
Gasman destacó que se inmunizó a los docentes en las primeras etapas del plan nacional de vacunación justamente para poder retomar las clases presenciales lo antes posible.
Incluso el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) ha resaltado que la experiencia internacional demuestra que el cierre prolongado de las escuelas puede afectar negativamente a toda una generación en el corto, mediano y largo plazos por la pérdida de conocimientos y habilidades.