Washington. La economía y el mercado laboral de Estados Unidos se han recuperado al punto de que la Reserva Federal (Fed, banco central) estudia reducir sus medidas de estímulo para finales de año, estimó este viernes el presidente del banco central estadunidense, Jerome Powell.
La Fed se plantea reducir sus compras de bonos –programa que puso en práctica para apoyar la economía al inicio de la crisis sanitaria– desde su actual nivel de 120 mil millones de dólares al mes, pero el titular de la Fed no planteó un cronograma preciso.
En el esperado discurso en el simposio anual de banqueros centrales de Jackson Hole, en Wyoming, Powell enfatizó en cambio que no hay prisa por subir la tasa de interés de referencia desde sus niveles actuales de entre cero y 0.25 por ciento y sostuvo que el organismo no reaccionará a presiones inflacionarias que considera temporales.
Volvió a minimizar los temores de una inflación creciente, al señalar que los cuellos de botella que aparecen en las cadenas de producción y presionan el índice deberían resolverse, y que los aumentos de salarios no parecen transferirse a los precios.
Powell advirtió que actuar para responder a las presiones inflacionarias temporales “puede hacer más mal que bien. Una política inoportuna ralentiza innecesariamente la contratación y otras actividades económicas y empuja la inflación por debajo de lo deseado”, explicó, al tiempo que advirtió que, ante la necesidad de más avances en el empleo “ese error podría ser particularmente dañino”.
Récord en mercados
Powell dijo que a pesar del impacto de la variante delta del coronavirus, la economía estadunidense se está recuperando.
Con la campaña de vacunación, muchos comercios lograron reabrir y la tasa de desempleo bajó a 5.4 por ciento el mes pasado, más cerca de su nivel de 3.5 por ciento previo a la pandemia.
Para México el tema es relevante porque más de 80 por ciento de sus exportaciones tienen como destino Estados Unidos, que es también el principal socio comercial de México.
En los días previos al discurso de Powell, varios presidentes de bancos regionales de la Fed se mostraron a favor de una reducción gradual de las medidas de estímulo.
Powell, sin embargo, no se comprometió y no dio ninguna indicación de cuándo podría comenzar una reducción en la compra de bonos.
Las bolsas de Nueva York y México terminaron con récords impulsadas por el tono moderado del presidente de la Fed.
El principal indicador de la Bolsa Mexicana de Valores, (S&P/BMV/IPC), subió 0.26 por ciento y llegó a un máximo de 52 mil 425.64 unidades, su tercer récord en la semana. Con ello, acumuló una ganancia semanal de 1.96 por ciento, la más pronunciada desde inicios de mayo.
En Wall Street el Dow Jones subió 0.69 por ciento a 35 mil 455.8 unidades; el S&P 500 ganó 0.88 por ciento y llegó a la nueva marca de 4 mil 509.37 unidades, mientras el Nasdaq sumó 1.23 por ciento y anotó por primera vez 15 mil 129.50 unidades. Los tres índices registraron ganancias semanales.
Por su parte, el peso se apreció 16 centavos (0.81 por ciento) y cerró en 20.18 unidades por dólar en operaciones de mayoreo, de acuerdo con el Banco de México. En la semana ganó 23 centavos (1.16 por ciento).