Ciudad de México. La racha de tres superávits consecutivos en la balanza comercial del país se rompió en julio, pues observó un déficit de 4 mil 063 millones de dólares, comparado con el saldo superavitario de 5 mil 655 millones de dólares reportado en el mismo mes del año pasado, informó este viernes el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

“El fuerte crecimiento de las importaciones totales de mercancías hizo que estas rebasaran a las exportaciones y resultaran en un déficit comercial”, explicó Julio Santaella, presidente del organismo autónomo en un mensaje de Twitter.

El déficit del periodo de referencia es mayor reportado en los últimos 30 meses, pero también es el más elevado para un periodo similar desde 1991.

En los primeros siete meses del año el monto acumulado del comercio exterior del país presentó un déficit de 2 mil 968 millones de dólares.

El valor de las exportaciones de mercancías alcanzó 40 mil 888 millones de dólares, cifra que se tradujo en un aumento anual de 15.2 por ciento.

De dicho monto, 38 mil 005 millones de dólares correspondieron a exportaciones no petroleras, dato que representó un incremento de 11.5 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior. Por exportaciones petroleras México obtuvo 2 mil 883 millones de dólares, monto que significó un crecimiento de 104.6 por ciento anual.

Santaella comentó que con cifras ajustadas por estacionalidad, las exportaciones petroleras subieron 3.3 por ciento en julio respecto a junio y prolongaron su tendencia ascendente. “Su valor ya superó los niveles observados en 2018”, dijo.

El presidente de Inegi destacó que las exportaciones automotrices, que aportaron 29 por ciento del valor total de las exportaciones de mercancías en los primeros siete meses de 2021, han sido afectadas por problemas en cadenas de insumos, por lo que en julio cayeron 3 por ciento respecto a junio y tienen una tendencia a la baja.

El valor de las importaciones de mercancías en julio fue de 44 mil 951 millones de dólares, monto que implicó un alza de 50.6 por ciento frente a julio del año pasado.

Dicha cifra fue reflejo del avance 119.7 por ciento anual en las importaciones petroleras, cuyo valor fue de 4 mil 994.6 millones de dólares. Mientras que las no petroleras crecieron 44.9 por ciento, pues las compras al exterior fueron de 39 mil 956.1 millones de dólares.

Con cifras ajustadas por estacionalidad, las importaciones totales de mercancías avanzaron 1.5 por ciento mensual, como resultado del crecimiento de 1.4 por ciento en las no petroleras y 3.3 por ciento en las exportaciones petroleras, dijo Santaella.

Por tipo de bien, las importaciones de bienes de consumo ascendieron a 5 mil 501.4 millones de dólares, monto que implicó un crecimiento 63.7 por ciento en comparación con el mismo lapso de 2020.

Los bienes de uso intermedio sumaron 36 mil 031.7 millones de dólares, dato que significó un aumento de 51.4 por ciento anual.

Las importaciones de bienes de capital aumentaron 27.4 por ciento respecto a igual periodo de 2020, pues sumaron 32 mil 682.3 millones de dólares.

“Los datos de la balanza comercial de julio son una señal alentadora para la actividad económica al inicio del tercer trimestre del año, sobre todo en lo que concierne al consumo interno”, resaltaron analistas de Monex.

Destacaron “el robusto crecimiento del volumen total del comercio, sobre todo ante la debacle del sector automotriz, pues ello indica que una vez que se normalicen las condiciones, el potencial de crecimiento puede ser muy amplio”.

Confiaron que agosto brinde señales de estabilización en este rubro, lo que contribuiría a acercar a la balanza a un saldo más neutral de cara a la parte final del año.