Ciudad de México. La petrolera noruega Equinor dejará de operar los bloques 1 y 3 que ganó en las rondas de licitaciones petroleras en México, debido a que busca hacer un reposicionamiento de sus inversiones en todo el mundo.
Desde “el 15 de junio, Equinor lanzó una nueva estrategia que ha llevado a una revisión y reposicionamiento de nuestra cartera de exploración”, dijo a La Jornada una portavoz de la firma de petróleo, gas natural y energía conocida anteriormente como Statoil.
“Hemos decidido buscar principalmente oportunidades de exploración en cuencas petrolíferas priorizadas. El cambio es parte del trabajo para optimizar la cartera internacional de petróleo y gas, con menos países y una presencia más profunda en áreas priorizadas seleccionadas”.
“Lamentablemente, México es uno de los países de los que salimos como parte de este reposicionamiento”, puntualizó.
En 2016 Equinor se adjudicó en la primera ronda petrolera una concesión por los bloques 1 y 3 de la Cuenca Salina en una subasta de aguas profundas.
Datos de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) señalan que la inversión aprobada en planes de exploración, evaluación y desarrollo para la ronda 1.4 por parte de Equinor Upstream México entre 2017 y 2022 ascendería a 261 millones de dólares.
Hasta julio pasado, las inversiones registradas en contratos para la exploración y extracción de hidrocarburos sumó 26 millones de dólares entre 2017 y este año.
La adjudicación fue concedida entonces al consorcio formado por Statoil, ahora Equinor, con una participación de 33.4 por ciento, mientras que BP y Total cuentan con una participación 33.3 por ciento cada una.
Equinor es el operador del Bloque 3, mientras que BP es el operador del Bloque 1.
Ambas cubren un área de aproximadamente 5 mil 650 kilómetros cuadrados en una zona de aguas profundas en gran parte inexplorada.
De acuerdo con la compañía, que tiene participación estatal, la asociación trabajaba en la maduración de los activos.
Información de la petrolera noruega señala que las ofertas ganadoras para los bloques 1 y 3 presentadas por Equinor y sus socios consistieron en una regalía adicional de 10 por ciento sobre posibles ingresos futuros y un programa de trabajo adicional equivalente a un pozo licitable por bloque.
Cada bloque tiene un programa de trabajo mínimo según lo definido por las autoridades mexicanas, que incluye una variedad de actividades geológicas, pero no los pozos requeridos.