La compañía Último Tren Danza-Escena celebrará su vigésimo aniversario en el Centro Nacional de las Artes (Cenart) con cuatro funciones de la coreografía Campos blancos, de la autoría de Gregorio Trejo, en el Teatro Raúl Flores Canelo, con funciones desde hoy y hasta el domingo 29.
La obra, con cinco capítulos a la manera de solos, es un llamado contra el odio, la intolerancia, en favor de la libertad y el derecho de las personas de hacer y pensar diferente, sin que sea motivo de castigo, expresa Trejo en entrevista.
Último Tren Danza-Escena surgió en 2000, en la Ciudad de México. Gracias a que su propuesta se vio beneficiada por el Programa de Fomento a Proyectos y Coinversiones Culturales del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca) produjo El libro del Popol Vuh. Para la realización de Campos blancos la compañía también ha recibido apoyo del Fonca.
Campos blancos se divide en dos etapas. La primera es una parte virtual con ocho coreografías unipersonales para la cámara. En el Cenart se verá la segunda etapa, que consiste en llevar cinco de estos solos, o capítulos, “a la escena viva”, señala Trejo.
Aunque cada historia es distinta, desde un principio Trejo tuvo en mente la idea de que “nosotros, como humanidad, hemos crecido a un paso tan a prisa que nos hemos olvidado del hombre mismo. Campos blancos es una forma de volver a ver el humanismo, de defender los derechos humanos, para que las personas pueden pensar y ser de manera distinta, y que eso no sea motivo de represión. Por medio de estos cinco solos se da a entender que nadie tiene derecho de ofender a otro ser humano por el simple hecho de ser diferente”.
Los capítulos son: A mitad del silencio, sobre la opresión del hombre hacia la mujer en una situación de pareja; Carpe diem, o Vivir el momento, es la lucha del hombre por continuar en su camino.
Respecto al tercero, Sí, aquí estoy, Trejo indica que tiene un significado muy centrado en el feminicidio: “Es mi propia manera de decir basta, que no permitamos más este tipo de situaciones”. El cuarto capítulo se llama La mujer que vendía palabras. Es una especie de alerta en el sentido de no bajar la guardia porque, a pesar de lo logrado en cuanto a los derechos de las mujeres, siempre hay trabas. Hay que mantener una actitud vigilante porque siempre habrá quien busque un beneficio particular hacia un lado de la balanza.
El último capítulo, Siempre de nuevo, versa sobre “la poética de la tranquilidad, incluso la poética ahora que nos ha llevado el estar encerrados mucho tiempo en casa. En este solo he trabajado más la plástica del movimiento”.
Los bailarines que participarán en las funciones son: Samuel Rojas, Charlotte Rodríguez, Zaira Hernández y Carla Violeta Díaz. Se contará con la participación del actor Antonio Montes.
Gregorio Trejo fue coreógrafo de la cinta Apocalypto, dirigida por Mel Gibson, así como iluminador en repetidas ocasiones del Premio Nacional de Danza Contemporánea Inbal-UNAM.
Las funciones de Campos blancos serán hoy y mañana a las 20 horas, sábado a las 19 horas y el domingo a las 18 horas en el Teatro Raúl Flores Canelo, Centro Nacional de las Artes, Río Churubusco 79, colonia Country Club.