Durante el segundo trimestre de 2021, diversas variables económicas han empezado a mostrar “signos de recuperación”, entre ellos el número de personas ocupadas, pero para encontrar empleo, muchas de ellas han tenido que recurrir a la informalidad, con puestos de trabajo donde el ingreso no siempre basta para adquirir la canasta alimentaria, señaló el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
De acuerdo con un análisis dado a conocer por el organismo el viernes pasado, luego de la contracción de la economía que generó la pandemia de Covid-19 en el país, el impacto poco a poco ha comenzado a mitigarse, como lo demuestra el hecho de que entre el primero y el segundo trimestre del año en curso, el número de trabajadores registrados ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se elevó 0.7 por ciento (149 mil 671 empleos).
Sin embargo, el Coneval destacó que la mayoría de las las plazas de trabajo que se han abierto en dicho periodo corresponden a la informalidad, un ámbito en el cual ha aumentado la cantidad de personas que no alcanzan a percibir lo suficiente para comprar los alimentos que necesitan ellos y sus familias.
Según los estudios del organismo, el número total de personas ocupadas entre el primer y el segundo trimestre de 2021 aumentó en 2.3 millones, pero de ese total, 1.9 millones de trabajadores (82.6 por ciento) se incorporaron a empleos informales (en los que no tienen acceso a servicios de seguridad social ni un sueldo fijo), y apenas 0.4 millones (17.3 por ciento) lo hicieron en un ámbito formal.
En el mismo periodo analizado, el porcentaje de personas laborando en condiciones de informalidad con ingresos promedio por debajo de la canasta alimentaria (mil 730 pesos mensuales, a junio de 2021) aumentó de 19.8 a 21.2 por ciento, mientras en los trabajadores formales este índice permaneció en 0.9 por ciento.