Ciudad de México. El regreso a clases presenciales significa, por supuesto, riesgo de focos infecciosos, pero “los niños están esperando ansiosamente volver” a sus escuelas, dijo el representante en México del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Luis Fernando Carrera Castro.
En la conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional, frente al presidente López Obrador, informó que a escala mundial más de mil millones de menores han retomado las clases presenciales y 750 millones están a punto de hacerlo, pero todavía hay 150 millones que nunca han vuelto a clases, durante el año y medio de la pandemia, de los cuales México contribuye, lamentablemente, con casi 37 millones.
Minutos después, el mandatario instó a los “hijos y a los nietos” de los directivos de los medios de comunicación (contrarios a la posición del gobierno) a ayudarlo a “convencer a sus papás y a sus abuelos” de la importancia de regresar a clases.
Pidió nuevamente a los opositores hacer a un lado las diferencias políticas y la fobia a su gobierno, y no medrar con los asuntos sanitarios o educativos.
En su exposición, López Obrador hizo referencia a la posición de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), la cual, dijo, no está a favor del regreso, tal como Mexicanos contra la Corrupción, grupo que desde hace muchos años ha defenestrado al magisterio.
Reprochó también que sus adversarios utilicen cualquier cosa para atacar al gobierno: que si por apoyar a damnificados de Haití, que si se corta el cabello en su oficina o que si en un evento estaba a punto de echarse un coyotito. “Están al tanto de todo, buscando las podridas”.
Máximo histórico en suicidios de menores
El subsecretario de Derechos Humanos de la secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas, expuso un diagnóstico elaborado por el gobierno sobre los graves efectos del confinamiento: aumento de la violencia en diversas modalidades, especialmente la familiar: de enero a junio del año en curso fueron abiertas 129 mil carpetas de investigación, 24 por ciento más que en el mismo periodo de 2020. Las más violentadas fueron las niñas, adolescentes y adultas.
Además, se incrementó la deserción escolar, los homicidios infantiles y los embarazos en niñas menores de 14 años, la mayoría por violación sexual o matrimonios arreglados. Lo más delicado, dijo, es el incremento a máximos históricos de la tasa de suicidios en menores de edad.
Nashieli Ramírez, presidenta de la Comisión de los Derechos Humanos de la Ciudad de México, divulgó una encuesta en la que se muestra que 70 por ciento de los niños y jóvenes consultados quieren volver a la escuela.
La secretaria de Educación Pública, Delfina Gómez, expresó de la multicitada carta responsiva que si ese documento limita el regreso a las aulas, “pues lo quitamos… La carta no existe, se elimina”.
El representante de Unicef ofreció la cooperación en cuatro frentes, entre estos un efectivo monitoreo de las escuelas. “Por supuesto que puede haber focos infecciosos, eso démoslo por descontado, que esuna posibilidad. La pregunta no es si va a haber, porque ha habido focos infecciosos por todo el territorio nacional, ¿por qué no habría de haberlos en las escuelas y colegios? Es algo normal que suceda, la pregunta es, ¿cómo los manejamos?”