Brasilia. El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, pidió este viernes al Senado abrir un proceso de destitución contra un juez de la suprema corte, en medio de tensiones entre ambos poderes.
El presidente del Senado, Rodrigo Pacheco, confirmó haber recibido la solicitud de destitución contra Alexandre de Moraes, uno de los once jueces del Supremo Tribunal Federal (STF) con quien mantiene una fuerte confrontación desde hace meses.
Pacheco anticipó que "analizará" la solicitud, pero pese a ser un aliado del gobierno, ya mostró un distancimiento de propuestas de similares y advirtió que ese procedimiento es un mecanismo que "no debe ser banalizado, ni mal usado".
"Voy a insistir en ese punto que no vamos a ceder a ningún tipo de ataque para desunir a Brasil (…) cuenten conmigo para esta unión y no para la división", dijo a periodistas en Sao Paulo.
Se trata de la primera solicitud de destitución (impeachment) contra un juez del STF realizada por Bolsonaro desde que asumió el poder en enero de 2019.
El gobernante había anticipado el sábado que solicitaría ese procedimiento contra dos jueces del STF: Moraes y Luis Roberto Barroso, a quien llegó a tildar de "imbécil" por su gestión como presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE). El segundo fue excluido finalmente.
Bolsonaro sostuvo que De Moraes y Barroso, que también integran el TSE, "sobrepasan los límites constitucionales con sus acciones".
El cuatro de agosto, De Moraes ordenó investigar al presidente por crímenes de "calumnia" e "incitación al crimen", entre otras causas relacionadas con sus cuestionamientos -sin pruebas- a la legitimidad del sistema de votación electrónica en Brasil, vigente desde 1996.
La decisión respondió a un pedido del TSE, que había abierto dos días antes una investigación por los ataques del presidente contra el sistema de votación, llegando a dejar planear dudas sobre la celebración de los comicios presidenciales de 2022.
Bolsonaro, quien busca la reelección el próximo año, pide que las urnas electrónicas impriman un recibo de los votos, con el fin de que puedan contarse físicamente. Pero Barroso se niega rotundamente debido a los riesgos que implicaría volver a una modalidad que en el pasado ya derivó en fraudes.
La decisión de De Moraes, quien será presidente del TSE durante las próximas elecciones, acabó por incluir a Bolsonaro en la investigación abierta en 2019 por el STF para investigar noticias falsas, ofensas y amenazas a varios de sus jueces.