Hundidos en el fondo de la tabla y sin probar la victoria, el defensa de Pumas, Nicolás Freire, reconoció que los jugadores “somos los responsables” de los resultados, más allá del técnico Andrés Lillini o la directiva, y señaló que “por dignidad”, la escuadra debe conseguir puntos en el duelo del domingo ante Puebla.
“Veo enojo en el equipo y vamos a canalizarlo a cosas buenas; esto es: dar resultados, es de ganar y con Puebla vamos a ganar. Ganaremos con Puebla y, agárrense, de ahí nadie nos va a parar”, aseveró respecto de la situación que vive el equipo.
“Nos sentimos mal, los que jugamos somos nosotros. Entrenamos con intensidad, pero llega el fin de semana y no sale como lo trabajamos. Hay una frustración por todo. El 3-0 ante Necaxa fue una locura que nos impactó a todos. Sentíamos que íbamos de menos a más, pero al final fue un golpe duro, pero de lo que se trata es de levantarte.”
Los felinos enfrentan otro complicado comienzo de torneo, luego de encontrarse en el último puesto con dos puntos, sólo un gol a favor y ocho en contra. Además, deberán encontrar un sustituto para la defensa central, tras la salida de Johan Vásquez, quien fichó con el Genoa, de Italia, y la lesión que sufrió Ricardo Galindo.
“Lo que nosotros necesitamos es ganar, hacer un gol y mantener el arco en cero, eso nos dará el golpecito de confianza para todo lo que viene. No sólo jugamos por esta institución, sino por la dignidad propia, como profesionales y vivimos del futbol”, señaló Freire en videoconferencia.
Aseguró que trabajan con apoyo de entrenadores para levantar el ánimo del plantel y sostuvo que, en caso de vencer a Puebla en la jornada seis, será un parteaguas para comenzar una racha positiva.
“Somos conscientes de lo que estamos pasando, no nos gusta un carajo, nos duele, estamos enojados pero vamos a tratar de plasmar ese enojo dentro de la cancha para sacar cosas positivas.”
Indicó que aún no es momento para hablar de una crisis futbolística, al recordar que Pachuca también tuvo un mal arranque en la temporada pasada y llegó a la liguilla.
“Pachuca ganó en la fecha 10 y poco antes querían echar al técnico. Al final se metió a liguilla y no se habló más. No veo crisis, sino malos resultados; el trabajo hecho en la semana no se refleja en los partidos, eso duele”, apuntó.
Pese a los marcadores obtenidos en este torneo, comentó que la directiva mantiene su respaldo a todo el equipo, tal como lo hizo desde el primer día de Andrés Lillini como estratega. “El apoyo siempre ha estado, sólo dependemos de un resultado positivo para que las cosas se acomoden”, aseguró.
En tanto, Puebla llegará al duelo del domingo en circunstancias similares a las de los auriazules al tener apenas tres puntos y estar ubicados en el lugar 14 sin triunfos.