Ciudad de México. El presidente Andrés Manuel López Obrador pidió a sus opositores hacer a un lado la fobia a su gobierno, las diferencias políticas y no medrar con temas como la salud, educación y seguridad de la población.
Lamentó que la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) no esté en favor de la vuelta a las aulas, tal como lo han expresado sus adversarios.
Luego de presentar gráficas sobre incidencia delictiva en los dos sexenios anteriores -y remarcar que los problemas en esta materia le fueron heredados- el mandatario enlazó el tema, la presencia de grupos delictivos, con otros asuntos como la pandemia y la vuelta a las aulas.
“Ahora, de repente, así como salieron feministas o especialistas en epidemias, ahora les preocupan las niñas y los niños.
“Me acuerdo que estos de Unidos en favor de la Corrupción, cómo se llama?, los de Claudio?, Mexicanos en favor de la Corrupción decían que ‘qué barbaridad’ que los niños no tenían clases, que los maestros eran unos irresponsables y ahora resulta que este organismo de Claudio y de todos estos conservadores no quieren que haya clases presenciales.
“Y fíjense cómo son las cosas, las vueltas que da la vida, Claudio -y su grupo- coinciden con la CNTE que tampoco quieren que se regrese a clases”, señaló en la conferencia de prensa matutina.
Llamó entonces a los “hijos y a los nietos” de directivos de los medios de comunicación -que han criticado retomar clases presenciales- ayudarlo “a convencer a sus papás y a sus abuelos de que es importante que regresen a clases.
“Y hagan a un lado la fobia contra nosotros, porque la educación es muy importante, es como la salud, como la seguridad.
“Podemos tener problemas y claro que vamos a tener, ni ellos quieren parecerse a nosotros y nosotros. O queremos parecernos a ellos, son proyectos distintos y contrapuestos de nación, pero vamos a llegar a acuerdos generales, vamos a respetar lo que implica el bienestar de todos”, dijo.
Enseguida remarcó la división de asuntos y pidió: “no metamos en esto, en nuestras diferencias políticas, que son legítimas, la salud del pueblo, no medremos con la salud del pueblo, con la educación, con los niños, incluso con la seguridad.
“No al sensacionalismo, no al regreso de Alarma, esa revista que existía, que se vendía mucho porque todo era sangre, dicen que si se mojaba o se exprimía, era sangre, y si se le quemaba era olor a droga. Ya no eso, vamos hacia adelante”.