Para no olvidar el pasado, el actual campeón Cruz Azul ganaba el partido, sufrió una expulsión y de último minuto fue empatado por Monterrey, para quedar 1-1 en el estadio Azteca en la fecha cinco del Apertura 2021.
Un duelo muy cerrado y que creció en los minutos finales. Un penal anotado por Jonathan Cabecita Rodríguez al 65, para la ventaja Celeste, pero la expulsión de Ignacio Riveros al 85 los dejó vulnerables. Al 91, José Alvarado respondió con un cabezazo para conseguir el empate que evocó los años fatídicos de La Máquina celeste.
El primer tiempo no ofreció gran cosa. Apenas unas cuantas llegadas de cada lado. Cabecita Rodríguez para no variar del lado Celeste y, desde luego, su contraparte con Funes Mori por los Rayados. Pero sólo alcanzaron a ponerle un poco de emoción, porque el resto del tiempo no era claro ni el dominio ni hacia dónde tiraba la pelota. Todo era un vaivén, un duelo de pulsos que se tensaba en el medio.
Javier Aguirre, entrenador de Rayados, se marchó muy molesto a los vestidores. Después de los gritos en el área técnica y las notas que tomó meticuloso, parecía ensayar los regaños que daría en el descanso.
Regresaron al campo, pero ambos clubes seguían empantanados, como si no lograran doblegar la resistente contención, que hacía poco claras y breves las oportunidades que tenían con la pelota.
Era evidente que el primer error sería capitalizado por el rival. Lo cometió Cruz Azul, a Maxi Meza lo dejaron conducir a placer y a media distancia disparó contra el marco del celeste Andrés Gudiño, quien atajó, pero no pudo quedársela y mientras rodaba en el área, llegaba Funes Mori. La defensa Cementera logró impedir que el Mellizo hiciera de las suyas.
Y la respuesta fue el ataque de Santiago Giménez –quien tenía sólo unos minutos de entrar al campo–, que terminó en una entrada desafortunada del portero Rayado, merecedora de un penal. Cabecita fue el encargado de cobrar la pena máxima y lo hizo sin titubeos para conseguir el 1-0 al minuto 65.
De pronto se incendió la cancha, el gol en contra picó el orgullo Rayado, que se desbocó hacia el área rival. Maxi Meza entró muy decidido y Pablo Aguilar lo detuvo con fuerza. El jugador del Monterrey quedó tumbado y dejó la duda si aquello era un penal. El árbitro no lo marcó.
Para darle más emoción al final, Ignacio Rivero se barrió violento contra el tico Joel Campbell y fue expulsado, para dejar a La Máquina con diez hombres al 85.
En tiempo agregado, José Alvarado metió un cabezazo furioso que dio el empate al Monterrey, para recordar el pasado tormentoso de los celestes.
En otro duelo, Santos y Atlas también empataron 1-1 en Torreón