La pandemia de Covid-19 ha causado un retroceso de unos 18 años en los avances que las mujeres latinoamericanas ya habían logrado en contra de la pobreza, y uno de los aspectos que han resultado especialmente afectados para ellas es el derecho a la vivienda, señaló la arquitecta y militante feminista Ana Falú.
Durante un conversatorio virtual sobre el tema, convocado ayer por la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), la fundadora de la Red Mujer y Hábitat de América Latina señaló que la emergencia sanitaria acentuó los problemas de racismo e inequidad que ya existían desde antes en la región de América Latina y el Caribe, sobre todo en las ciudades.
Una muestra de ello, dijo, es que en los asentamientos informales de las zonas urbanas la mortalidad por Covid-19 fue 35 por ciento más alta que en los barrios y colonias de alto poder adquisitivo, lo cual afectó en gran medida a hogares que son dirigidos por mujeres solas o en los que viven personas en condición especial de vulnerabilidad.
En ese contexto, la especialista argentina señaló que a las mujeres se les ha asignado de forma desproporcionada la labor de cuidadoras de sus seres queridos y educadoras de los niños y niñas. Pese a lo anterior, ellas siguen estando “omitidas en la política y diluidas en la familia”.
Por lo anterior, Falú señaló que no es deseable volver a la misma “normalidad” que existía antes de la pandemia en aspectos como el de la vivienda, en el cual dominaba una visión de crecimiento horizontal y desordenado que genera miles de casas nuevas, pero abandonadas, sino que es necesario mejorar y redensificar las zonas habitacionales que ya existen.
Por su parte, Efraín Guadarrama, coordinador nacional de México ante la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, coincidió en que la pandemia ha afectado de manera predominante a las personas que viven en zonas urbanas pobres, pues 55 por ciento de las viviendas de dicho entorno sufren de hacinamiento, lo cual impide tomar medidas de “sana distancia” y la realización de cuarentenas.
En el acto participó el titular de la Sedatu, Román Meyer Falcón, quien reiteró que en el país hay unas 650 mil viviendas abandonadas –sobre todo en la región norte–, lo que ha generado graves problemas de inseguridad.