Ciudad de México. Con un voto menos, Morena y sus aliados no lograron la mayoría calificada necesaria para que la Comisión Permanente citara a un tercer período extraordinario de sesiones, pero no se desechó la propuesta, ya que la iniciativa de la Junta de Coordinación Política fue regresada a comisiones, luego de una accidentada sesión, en la que incluso se hizo un receso para que la mesa directiva pudiera analizar las quejas del grupo mayoritario.
Morena requería 24 votos, que son las dos terceras partes de los 35 senadores y diputados presentes, pero aún con el aval de sus aliados del PVEM y PT logró sólo 23 votos a favor, con 12 en contra de la oposición, que sufragó en en bloque.
Sin embargo, senadores y diputados de Morena se inconformaron, bajo el argumento de que faltaron sólo unas décimas, ya que el voto de 23 legisladores representa más del 60 por ciento, que son las dos terceras partes requeridas.
Los diputados morenistas Rubén Cayetano y María del Carmen Almeida reprocharon al presidente de la Permanente,Eduardo Ramírez, que no se hubiera cumplido el acuerdo inicial de que primero se discutiera la posibilidad de convocar a ese tercer período extraordinario, en el que se discutirían la Ley Federal de Revocación de Mandato, la Ley Federal de Juicio Político y la nueva Ley de la Armada.
Resaltaron que se pactó que hablaran cinco oradores a favor y cinco en contra y luego se votara, pero se hizo lo contrario.
Insistieron en que la ley no habla de porcentajes, sino de tercios y con los 23 votos se dan las dos terceras partes y reclamaron que hubiera un receso para que la verificara la votación.
La presidenta de la Cámara de Diputados, Dulce María Sauri, así como el coordinador panista en San Lázaro, Marco Adame, pidieron que se concluyera el trámite y que Ramírez declarara que la Permanente rechaza convocar a un tercer período extraordinario, ya que los votos no se pueden fraccionar.
“Acepten la derrota”, "las matemáticas no fallan", gritaban panistas y priístas a morenistas. Hubo recriminaciones de ambas partes y al final Ramírez decidió a las 14:30 horas un receso para “que la mesa directiva pueda tomar una decisión”.
La propuesta no fue desechada, sino que se turnó a comisiones, lo que significa que puede discutirse nuevamente en otra sesión de la Comisión Permanente. Desde antes del inicio de la sesión priístas, panistas y perredistas advirtieron que votarían en contra.
“No creo que tenga viabilidad, porque es innecesario, es precipitado y tiene en el dictamen que fue aprobado un procedimiento dudoso en el Senado de la República, muchísimas deficiencias y no contempla lo que es indispensable que es la reforma a la Ley Orgánica del Congreso de la Unión en el caso de que el sí por la revocación de mandato sea el que triunfe”, señaló Sauri.