Entre diciembre de 2020 y enero de 2021, durante el segundo repunte de la pandemia de Covid-19 en México, hubo más de 24 mil hospitalizados por esta enfermedad. Esa es la capacidad máxima de atención a escala nacional y se puede retomar con base en la demanda, señala información de la Secretaría de Salud.
La guía de continuidad en la prestación de los servicios médicos establece que del número de camas reconvertidas para recibir a personas con coronavirus, las instituciones deben conservar 30 por ciento para hacer frente a cualquier nueva situación de emergencia. Conforme disminuyeran los contagios, se podría retomar la atención de pacientes con otras enfermedades.
Eso es lo que ocurrió en la mayor parte del país durante el segundo trimestre del año, en el que incluso hubo varias entidades –la Ciudad de México entre ellas– que llegaron al color verde del semáforo de riesgo epidemiológico.
El nuevo incremento de contagios a partir de mayo se aceleró por la predominancia de la variante delta, la cual, de acuerdo con investigadores, tiene una mayor capacidad de transmisión. De ahí el aumento acelerado en la demanda de hospitalización, sobre todo en camas generales.
El pasado lunes, los pacientes internados eran 13 mil 547, es decir, 43 por ciento menos respecto de la cifra más alta alcanzada el 27 de enero pasado. En relación con el periodo de inicio de la emergencia sanitaria, las cifras son más parecidas, para el 23 de julio de 2020 había 16 mil 339 camas ocupadas.
En la revisión por estados de la República también hay diferencias. Mientras en julio del año pasado tres entidades reportaron ocupación superior a 70 por ciento de sus camas generales, para la segunda ola fueron nueve en el momento más álgido y el lunes eran cinco.
Respecto de las camas con ventilador, ningún estado tuvo más de 70 por ciento de sus espacios ocupados; en la segunda fueron tres y ahora la cifra también es cero.
El registro de la red IRAG señala, respecto de las unidades médicas, que en julio de 2020 hubo hasta 227 con más de 70 por ciento de ocupación en sus camas generales, en enero pasado fueron 352 y el pasado lunes eran 262.
Se enfatiza en las camas generales porque son las que mayormente están ocupadas durante la tercera ola de Covid-19 y especialistas comentaron que entre las causas de este fenómeno es que los cuadros de la infección son moderados y en adultos menores de 49 años.
La capacidad de atención posible también se observa en el Instituto Mexicano del Seguro Social, que sólo en la zona metropolitana del valle de México logró reconvertir 4 mil 500 camas para enfermos de Covid-19 y la semana pasada atendía a 2 mil personas, en su mayoría en camas generales, sin necesidad de ventilación mecánica.