Las plataformas de intercambio de activos virtuales, algunos de ellos conocidos como criptomonedas, deberán reportar a la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) sobre las operaciones realizadas a través de ellas, aun cuando las empresas o la infraestructura tecnológica con la que se ofrezcan dichos servicios se encuentren en otro país.
La UIF, dependiente de la Secretaría de Hacienda, detalló que “con el objetivo de mantenerse a la vanguardia en el monitoreo de operaciones realizadas por los proveedores de servicios de activos virtuales con clientes o usuarios ubicados en territorio mexicano” emitió un criterio para que estas plataformas remitan un informe sobre sus operaciones, aunque no se encuentren bajo jurisdicción mexicana.
La Ley Federal para la Prevención e Identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita reconoce como actividades vulnerables el intercambio de activos virtuales a través de plataformas electrónicas y advierte que las transferencias por una cantidad igual o superior al equivalente a 645 unidades de medida y actualización (UMA’s) –57 mil 804.9 pesos en 2021– deben notificarse a la Secretaría de Hacienda.
Además de las alertas de organismos internacionales sobre el papel que tienen los criptoactivos en actividades ilegales –por ejemplo, el más reciente Informe mundial sobre las drogas reporta que este mercado a través de Internet alcanza ventas anuales por 315 millones de dólares– la UIF también ha elaborado un mapa de riesgo sobre estos recursos.
Entre mayo del año pasado y el mismo mes de 2021, se registraron mil 479 reportes de operaciones inusuales relacionados a mil 224 sujetos que hicieron movimientos con activos virtuales. El 23.9 por ciento de esas personas y empresas se encuentran en alerta alta de estar lavando dinero.
Así como a lo largo de 2020 despuntaron las operaciones con activos virtuales en el mundo, lo hicieron los avisos de operaciones inusuales que llegaron a la UIF.