Tras la alegría por la medalla de bronce en Tokio, el regreso a la realidad de la Liga Mx ha sido brusco. Con la turbulencia de un aterrizaje forzoso se estrella el aficionado ante el insoportable tedio de partidos insulsos, deprimentes, donde los futbolistas son incapaces de hilvanar tres pases y pronto se llega a la conclusión de que el torneo debería estar integrado por un máximo de diez equipos, sólo los de nivel competitivo.
Es consecuencia de haber quitado el descenso. Hasta los llamados ‘grandes’ se echaron a la hamaca y arrastran el prestigio de forma ignominiosa. La triste procesión tiene a los lastimeros Pumas al frente. Los auriazules han marcado un solo gol en 360 minutos. La presión es todavía mayor para los considerados poderosos; los Tigres de Miguel Herrera naufragan en la mediocridad, están a media tabla, perdieron en Seattle y el escaso público ya entona a todo pulmón el “¡fuera Piojo!”.
Y por si resulta insuficiente el sopor que produjeron los partidos Puebla-Tigres, Juárez-Xolos o Pumas-Querétaro, llega la receta perfecta para un óptimo sueño: ¡hay jornada doble!… Los Diablos del Toluca se despeñaron, dieron tremendo resbalón al son de 4-0 frente al Cruz Azul; era un partido que prometía, pero al minuto 10 dejó de tener interés... Increíble que con récord diario de contagios de Covid-19 hubo acceso al público en el estadio Azteca. Impera el negocio.
La Máquina se repuso del traspié en la semifinal de la Concachampions ante Rayados: el 1-0 en contra lo puede revertir sin problema en la vuelta como local, y parece encender turbinas en un territorio donde ha retomado absoluta confianza de la mano de Juan Reynoso. El cetro de la Liga Mx, con tanto equipo desorientado, parece a merced de los celestes y de un puñado de serios aspirantes. Lo demás será complemento innecesario, mero relleno.
Jaime Lozano cumplió con creces en los Juegos Olímpicos a pesar del entorno adverso, no sólo por lo que implicó la pandemia y la escasez de partidos de preparación, sino también porque, contrario a lo que se dijo, no tuvo prioridad y el técnico Gerardo Martino se reservó a varios elementos que daban la edad para ir a Tokio. Con la presea de bronce, Lozano revalidó las credenciales que presentan a México como una potencia en equipos menores.
El Tri de cadetes acapara reflectores en el plano internacional, el zaguero Johan Vásquez ya está en Italia –Pumas, desde luego, no iba a desdeñar la oportunidad de embolsarse unos euros–, se habla también de Sebastián Córdova, Luis Romo… sin duda saldrán otros más, porque talento sobra. El desastre viene después, cuando dan el salto al representativo mayor, donde el quinto partido en mundiales sigue siendo un sueño guajiro.
El logro de la Sub-23 disimuló el fracaso del Tri en la Copa Oro frente a un equipo B de Estados Unidos que ni siquiera fue mejor, pero supo ganar. Este chasco se sumó al de la Nations League. A causa de estos embates, el Tata Martino –en pleito sin retorno con Javier Chicharito Hernández–, está en el ojo del huracán. Rogelio Funes Mori ha brillado más en el Monterrey con su marca de 123 goles que en selección, donde se espera con ansia el regreso de Raúl Jiménez.
En puerta está una etapa definitoria. En un par de semanas México enfrenta a Jamaica en el arranque del octagonal de la Concacaf hacia la Copa del Mundo de Qatar. Enseguida enfrentará a Costa Rica y a Panamá. Quizás lo de menos sea el pago de veto por el grito homofóbico; el riesgo estriba en los partidos de visita que deberá hacer un Tri más aburguesado que nunca, habituado a los lujos y comodidades que da el jugar de forma permanente en Estados Unidos.
Antonia Is vino, vio y se fue. Pachuca hizo demasiado estruendo a su llegada, sin embargo, la estratega ibérica no dejó gran huella en su paso por la liga de mujeres, donde se espera el despunte de las foráneas que presumen Tigres, Rayadas, Cruz Azul, Puebla, Xolas y Querétaro, aún en proceso de adaptación. Alicia Cervantes llegó a 60 dianas, en tanto, en el CAR realizan visorías a aspirantes a la Sub-15 y 17, habrá que ver bajo qué criterios las colocarán en equipos.