La segunda etapa de la reorganización de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), obligará la aprobación de reformas constitucionales, para que se formalice la incorporación de la Guardia Nacional como fuerza armada y también la modificación de diversos ordenamientos como la Ley Orgánica de la Fuerza Aérea y el Reglamento Interior de la Defensa Nacional.
Con la puesta en marcha de la Comandancia del Ejército y los cambios que se plantean en lo administrativo y operativo, el ahora subsecretario de esta institución castrense será encargado de despacho cuando falte temporalmente el titular. Asimismo, la Fuerza Aérea dejará de tener en su estructura la Brigada de Fusileros Paracaidistas, dependerá del Ejército, y se denominará Cuerpo de Aerotropas.
En el caso de la Fuerza Aérea, las modificaciones operativas que tendrá esta agrupación señalan que el comandante tendrá coordinación con los mandos aéreos, los titulares de las regiones, bases y estaciones aéreas, además de que se creará una subjefatura de doctrina y estarán subordinadas a este mando las direcciones de meteorología, de control de vuelo, mantenimiento, electrónica de aviación y abastecimiento de material aéreo.
Una vez que el viernes se oficializó la creación de la Comandancia del Ejército Mexicano, como lo publicó La Jornada en julio pasado, y de acuerdo con el proyecto de restructuración de la Sedena, la segunda etapa estará dirigida particularmente a la integración de la Guardia Nacional como fuerza armada.
Para esto, el primer paso será que en el próximo periodo legislativo que se iniciará en septiembre, el gobierno federal presente ante el Poder Legislativo el “proyecto de iniciativa de reforma constitucional”, que será remitido a la Cámara de Diputados.
Además, integrantes de la Sedena realizarán actividades de cabildeo con los congresistas a fin de que se apruebe el proyecto y se promulgue la reforma constitucional con la cual la Guardia Nacional deje de formar parte de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
De esa manera, se procederá a “materializar las adecuaciones orgánicas y administrativas”, y una vez que esto ocurra se realizará una ceremonia de pase de revista “de la entrada de la Guardia Nacional como fuerza armada adscrita a la Sedena”.
