París. En la presentación de Leo Messi y el resto de la constelación de fichajes al público del Parque de los Príncipes, el París SG estuvo a la altura de la fiesta, este sábado con su victoria 4-2 ante el Estrasburgo, que alimenta las esperanzas de una gran temporada.
Messi no jugó pero no por ello el PSG se quedó sin vivir una noche de ensueño, cuyo recuerdo quedará marcado en la memoria de los 48 mil espectadores que esperaban este momento desde hace meses.
El regreso de los aficionados, luego de un año y medio a puerta cerrada, total o parcial, llenó de emotividad este partido, disputado en medio de un ambiente que recordó por momentos a las grandes noches de Liga de Campeones.
Sobre el césped, los parisinos realizaron un primer tiempo para enmarcar, a la altura de las expectativas del público, con goles del argentino Mauro Icardi al minuto tres , Ludovic Ajorque en propia tras disparo de Kylian Mbappé al minuto 25 y Julian Draxler al minuto 27.
En el segundo tiempo el nivel bajó algún entero, ante las numerosas ausencias (Neymar, Messi, Di María, Verratti…) que privaron de apoyos a Mbappé, autor de dos pases de gol.
El internacional español Pablo Sarabia al minuto 85 cerró la goleada ante un Estrasburgo que dio la cara.
El ex del Atlético de Madrid y del Sevilla Kevin Gameiro al minuto 53 y Ajorque al minuto 65, ambos de cabeza, destaparon los temores en la parroquia parisina, hasta que la expulsión de Alexander Djiku al minuto 80 acabó con las opciones de remontada.
"Estoy muy contento con el rendimiento del equipo, el primer tiempo fue muy bueno. Destaco muchas cosas, la posesión, el hecho de haber jugado rápido, de crear ocasiones, de conceder pocas", afirmó Pochettino, quien añadió que Mbappé "está centrado en lo que tiene que hacer, hizo un muy buen partido".
Este victoria, unida a la de la semana pasada ante el Troyes (2-1), asegura al PSG finalizar la fecha en los puestos altos de la tabla.
Messi aclamado como un rey
Messi y Neymar, sentados juntos en el palco al comienzo del partido, pudieron disfrutar de un espectáculo en el que ambos suelen ser los protagonistas.
Para verlos vestidos de corto probablemente aún habrá que esperar al fin de semana del 11 de septiembre, luego del parón internacional, con la recepción del Clermont.
El público parisino ya dio una primera muestra de lo que será el ambiente cuando la Pulga toque sus primeros balones como jugador del PSG.
Achraf Hakimi, Georginio Wijnaldum, Gianluigi Donnarumma, Sergio Ramos y, finalmente, Lionel Messi fueron recibidos en lo que fue una fiesta para el público parisino.
Cada uno de ellos habló a la hinchada desde un pequeño podio en medio del campo.
"Bienvenido Ramos", "Welkom Wijnaldum", "Benvenuto Donnarumma", "Bienvenido Messi"… Las pancartas del Collectif Ultras Paris (CUP) fueron desplegadas en las gradas.
Y eso que el nombre del campeón del mundo galo de 22 años Kylian Mbappé, que aún no ha firmado su renovación con el PSG, en medio de rumores de un interés del Real Madrid, fue silbado en el Parque de los Príncipes en el momento de anunciarse la alineación del equipo.
El delantero estrella fue abucheado por primera vez, al inicio de la noche, cuando la periodista de PSGTV enumeró los jugadores que iban a ser de la partida contra los alsacianos.
Galtier gana en Lille
Horas antes, el Lille, vigente campeón liguero de Francia, fue humillado en su primer partido de la temporada en casa por el OGC Niza de su ex entrenador Christophe Galtier, que ganó por 4 a 0.
Lille y Niza habían empatado en el estreno de la presente campaña, ante Metz (3-3) y en casa contra Reims (0-0) respectivamente. El Niza, que ya estaba 3-0 al descanso, firmó la goleada con tantos de Kasper Dolberg al minuto uno, y al 64, Hicham Boudaoui al minuto cinco y Amine Gouiri al 45+4 de penal.
"Me gustó mi equipo. Deseaba que mi equipo se expresase como lo hacía el equipo al que dirigía la temporada pasada, con carácter, entusiasmo, solidaridad. El Niza se parece en su expresión al Lille de la temporada pasada", afirmó Christophe Galtier.
A un mes de comenzar la Liga de Campeones, el Lille está mostrando una versión preocupante. Además, la ausencia de Renato Sanches, que podría abandonar el club antes del final del mercato, no es algo que tranquilice a los aficionados, que regresaron a las gradas del Stade Pierre-Mauroy después de casi 18 meses de ausencia.
Con un punto en dos encuentros, el vigente campeón se sitúa en el lugar 16 antes de los siete partidos de la segunda jornada que quedan por jugar.