Nueva Orleans. Un agente federal antidrogas estadunidense conocido como el Diablo Blanco entre narcotraficantes fue sentenciado a más de 13 años de prisión por robar dinero de sospechosos, falsificar documentos del gobierno y cometer perjurio en un juicio federal.
La jueza federal Jane Triche Milazzo dijo que el veterano agente de la Administración de Control de Drogas (DEA), Chad A. Scott, causó daños “de gran envergadura … a la administración de la justicia”.
La emisión de la sentencia corona una causa de cinco años que sacudió la DEA y resultó en fallos contra otros tres miembros de una fuerza federal antidrogas basada en Nueva Orleans.
Los fiscales describieron a Scott como más peligroso que la mayoría de los traficantes de heroína a los que él encarceló, diciendo que el agente de Luisiana “violó toda ley posible” para implementar “su propia versión de justicia”. La pidieron a la jueza que sentenciar a Scott a dos décadas en prisión
“Él socavó la implementación de la ley y desprestigió el proceso judicial”, dijo el fiscal federal Timothy Duree al primer jurado que declaró culpable a Scott. “Juró defender la ley, pero en lugar de ello la violó para sus propósitos egoístas”.
Scott, de 53 años, fue condenado en juicios sucesivos por una larga lista de cargos de corrupción. Los cargos se derivan de una vasta investigación federal de acusaciones de mala conducta que habían rodeado a Scott durante gran parte de su carrera de 17 años, incluso mientras ocupaba titulares por confiscaciones de drogas entre Baton Rouge y Nueva Orleans.
Scott dijo a Milazzo que estaba “avergonzado de estar aquí” y añadió que desde hace tiempo había sido “condenado por la prensa y la opinión pública”. Pero trató de resaltar sus contribuciones a la ley y el orden y a la misión de la DEA, en la que dijo que creía verdaderamente. Dijo que fue dos veces blanco de planes de asesinato — “un ejemplo de lo que las personas están dispuestas a hacer para sacarme de investigaciones de narcotráfico”.
Scott hizo estas declaraciones — las primeras desde su arresto en el 2017 — durante una inusual audiencia de sentencia esta semana que reveló detalles de delitos que se dijo él cometió, pero de los que no estaba acusado, incluyendo colocar una onza (28 gramos) de marihuana en la camioneta de un individuo en el 2005 y lacerar la boca de una persona con el medallón de un collar en 1999.