Debemos dejar de contemplar la Conquista en términos nacionalistas, instó el historiador Martín Ríos Saloma, al aclarar que en el siglo XVI ni México ni España estaban constituidos como Estados-nación.
“Hemos pensando a lo largo de los años esta dinámica como propia de una historia nacional, en términos nacionales entre España y México, en el que el primero conquistó al segundo, como si esos dos Estados-nación contemporáneos hubieran existido en el siglo XVI.
Pero “ni la España ni el México actuales existían en ese entonces y, por el contrario, esas dos naciones son el resultado precisamente de esa compleja interacción a lo largo de los siglos”.
Martín Ríos participó en el conversatorio Mitos y hechos en torno de la Conquista de México, con el cual fue inaugurada este miércoles la jornada de humanidades La Conquista: Revisiones incómodas, organizada por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) como parte de su programa conmemorativo de los 500 años de la caída de la gran Tenochtitlan.
Teniendo como alternante a su colega Federico Navarrete, el especialista explicó que la península ibérica a principios del siglo XVI era un conglomerado de territorios y reinos, al igual que el territorio mesoamericano, por lo cual, no puede hablarse de dos naciones o países.
Es muy importante, dijo, repensar lo que ocurrió en la Conquista, adentrarse de nuevo en las fuentes y reconocer la amplia participación en ese proceso de las comunidades indígenas mesoamericanas.
Hay que “dejar de considerar a los indígenas como objetos pasivos de la historia, que simplemente reciben a los conquistadores y más bien tomarlos como actores sociales e históricos que respondían de manera distinta a las nuevas realidades que se les iban presentando”.
Coordinador académico de esas jornadas, Martín Ríos instó a dejar de ver a esos grupos indígenas como traidores y centrarse, más bien, en comprender cómo y por qué se aliaron con los españoles y actuaron como lo hicieron contra los mexicas.
A Federico Navarrete correspondió derribar el mito de que la Conquista de México se debe sólo a los españoles. Refirió que los estudios más recientes muestran que 99 por ciento del ejército que derrocó a la gran Tenochtitlán estaba integrado por guerreros mesoamericanos y sólo uno por ciento por solda-dos españoles.
“Nunca tendremos cifra precisas porque las historias del siglo XVI no se contaban de la manera en que se hace en la actualidad, pero las números que se manejan señalan entre 500 y mil españoles y entre 50 mil y 100 mil combatientes mesoamericanos. Esta simple estadística da una idea de por qué no podemos afirmar que los españoles conquistaron México”.
Aclaró, además, que las cosas no pasaron como Hernán Cortés lo asentó en sus Cartas de relación, en las que afirmaba que él ordenaba, definía las estrategias, dirigía los combates, conseguía las victorias y que los indios eran sus servidores y lo obedecían, cuando en realidad no controlaba del todo ni a los propios expedicionarios españoles y debió negociar con otras opiniones, como lo hizo también con los gobernantes indígenas aliados.
La jornada de humanidades La Conquista: Revisiones incómodas continuará este jueves e incluye conversatorios, conferencias, videocápsulas y música. Tiene como propósito difundir entre el público no especializado, incluyendo al infantil, las interpretaciones generadas por los especialistas en los años recientes sobre ese tema, con especial énfasis en cuestionar los mitos y poner de relieve la complejidad del proceso y la multiplicidad de actores que en él participaron. Las sesiones son transmitidas por la página de Humanidades UNAM en Youtube.