Las autoridades de Gustavo A. Madero han retrasado la entrega de apoyos y una eventual solución a las familias afectadas por la formación –desde hace casi cinco meses – de un socavón en la primera sección de San Juan de Aragón, provocada por una fuga en la red del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex), que afecta, además, a buena parte del deportivo Zarco, denunciaron habitantes de las casas dañadas.
Acusaron un escaso o nulo interés del alcalde Francisco Chíguil, quien designó al director de Asuntos Jurídicos y de Gobierno, Enrique Rojas, como enlace para gestionar el seguro por la afectación a 25 viviendas, de las cuales ocho fueron declaradas pérdida total, con quien se han tenido más reuniones canceladas que las llevadas a cabo, sin mayor avance.
Señalaron que les han advertido que el seguro sólo se entregará a los titulares de las escrituras, aunque en muchos casos no están actualizadas por tratarse de intestados o provenir de operaciones de compraventa, y sin importar que hay propiedades fraccionadas en dos o tres departamentos, donde viven igual número de familias.
El socavón apareció el 15 de marzo, en avenida 505 y quinta cerrada de avenida 503, pero hasta junio iniciaron los estudios, de manera parcial, de tomografía eléctrica resistiva, a cargo del Instituto de Geofísica de la UNAM, por insistencia de los vecinos de conocer la variación de la resistividad del subsuelo y evaluar el riesgo de nuevos hundimientos.
Algunos afectados, quienes solicitaron el anonimato, aseguraron que viven en la incertidumbre por la falta de interés de la alcaldía en apoyarlos y resolver un problema generado por una fuga en la red del Sacmex y la falta de reclamo del seguro, lo que les impide dejar sus casas porque “no hay nada que nos garantice una reparación”.
Comentaron que mediante un acuerdo publicado en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México, se les ofreció un apoyo para renta de 6 mil pesos mensuales, que algunos no han utilizado porque siguen viviendo en las casas afectadas o porque es insuficiente, pues “no vamos a encontrar con ese dinero un lugar para rentar y meter nuestras cosas”.
Las autoridades, dijeron, “nos han advertido que si el problema se prolonga hasta el próximo año, hagamos nuestras reservas de dinero, porque el presupuesto de cada año llega a la alcaldía por ahí de marzo, y careceríamos de esos recursos en enero y febrero de 2022, lo cual es injusto porque es un problema que nosotros no generamos”.
El área afectada “está delimitada por cintas de plástico amarillas y rojas y nadie puede traspasarlas, aunque no hay ninguna obra. Algunas casas fueron apuntaladas con vigas de madera y en una lona se advierte que es una zona de alto riesgo por hundimiento, por lo demás, parecemos una colonia fantasma”, señalaron.