Ciudad de México. La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, se manifestó por hacer una nueva actualización al semáforo epidemiológico en la que se incluya el número de personas vacunadas contra el Covid-19 como uno de los indicadores de peso para determinar el color del nivel de riesgo.
Insistió que con base en los datos de su administración, la capital del país se encuentra en naranja y agregó que el semáforo es útil, pero que la ciudad se encuentra en una condición distinta a la del año pasado; “ahorita no podemos cerrar restaurantes ni las actividades productivas”.
Respecto a que la Secretaría de Salud del gobierno federal puso a la ciudad en rojo, la mandataria atribuyó que esta diferencia en el color se debe a la falta de actualización de los datos por parte de la dependencia, aunque afirmó que hay coordinación entre las administraciones.
“Hubo una actualización, a mí me parece que tiene que haber una en donde pese mucho la cantidad de personas vacunadas que hay en un estado”, expresó Sheinbaum Pardo al ser interrogada sobre si el semáforo epidemiológico es útil, e indicó que ahora “tenemos que hacer que los empresarios cuiden, que se mantengan las medidas que ya conocemos y la ciudadanía nos cuidemos entre todos”.
Entrevistada luego de inaugurar el centro comunitario del programa Puntos de Innovación, Libertad, Artes, Educación y Saberes (Pilares) Salesiano, en la colonia Anáhuac, expresó que sin entrar en debates “nuestros argumentos de que estamos en naranja tienen que ver con los datos de los últimos 10 días y a veces la Secretaría de Salud federal toma datos previos para su determinación”.
Reiteró que en la ciudad la tasa de positividad no ha aumentado, se ha reducido la del número de personas que han ingresado a los hospitales y es una de las entidades con la mayor cantidad de adultos vacunados, 45 por ciento de ellos con esquema completo y de 80 por ciento con al menos una dosis.
Afirmó que la única manera de enfrentar el Covid-19 en este momento “es vacunar y vacunar lo más rápido posible para que todos tomemos en nuestras manos la salud, que sepamos qué debemos hacer y asumamos la responsabilidad”, pues ahora es muy difícil cerrar actividades dada la situación económica de la ciudad.
Negó que haya conflicto con las autoridades federales e incluso expresó su respeto al subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, así como al secretario Jorge Alcocer Varela, con quienes dijo tener muy buena relación, aunque insistió: “nosotros estamos convencidos de que el semáforo es naranja, con base en datos científicos, no es un tema de ocurrencia y ellos tienen datos que son previos”.
Al señalar que hay una buena comunicación y estrecha coordinación con las autoridades sanitarias federales, expresó que sí han aumentado los casos y se han reportado, pero “consideramos que se pueden seguir desarrollando las actividades si entre todos nos cuidamos”.
“No quiero entrar en el debate de si ellos dicen rojo, nosotros estamos convencidos de que estamos en naranja, sustentado con datos reales y para toda la población: hay que seguirnos cuidando, eso es lo más importante, porque independientemente si estuviéramos en amarillo, en rojo o en anaranjado de todas maneras la pandemia continúa y la única manera de evitar la hospitalización es vacunándonos, cuidando nuestra salud y protegiéndonos entre todos”.