La violencia de género se ha incrementado, admitió la presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Nadine Gasman, pero destacó que en la actual administración existe transparencia en cuanto a las cifras.
En conferencia de prensa con motivo del 20 aniversario del instituto, aseguró que ese tema “ha sido central en la agenda gubernamental, ya que antes los esfuerzos estaban dispersos y desarticulados”. Advirtió que la pandemia de Covid-19 agravó las agresiones contra ellas.
Celia Aguilar Setién, directora general de Planeación y Evaluación del instituto, dijo que “es cierto que ha aumentado la violencia, pero la tendencia anterior, cuando era de 3, 4 y 6 por ciento, se redujo a uno. Estamos angustiadas viendo cómo crece, aunque es menor, y no es consuelo, estamos igualmente enojadas y desesperadas, pero este problema de la violencia trasciende totalmente al Ejecutivo, es un asunto del Poder Judicial”.
Esta situación, expuso, se relaciona con la impunidad; es la falta de atención territorial, es la violencia generalizada y regionalizada, es el crimen organizado. Si lo miramos con todas estas agravantes, creemos que sí están avanzando los esfuerzos de articulación que se hacen con las fiscalías.
A partir de este gobierno, “la norma es que todos los asesinatos violentos deben analizarse como feminicidios, y después (de ser el caso) descartar”.
Anabel López Sánchez, directora para la promoción de una vida libre de violencia e impulso a la participación política del Inmujeres, reiteró que el compromiso central de este gobierno es no ocultar cifras, “es reconocer que tenemos una problemática”. Recordó que la mayoría de los delitos perpetrados contra el sector femenino son del fuero común, por lo que se trabaja de manera coordinada con los gobiernos estatales.
Esta semana, agrupaciones feministas señalaron que en los primeros meses del año hubo más de mil 500 asesinatos de mujeres, y que entre nueve y 14 son asesinadas cada día.
El Inmujeres considera que para prevenir la violencia es fundamental llegar a las causas, por lo que creó más de 200 redes de Mujeres Constructoras de Paz en los municipios con más violencia de género.