Cuernavaca, Mor., Las empresas KS Ambiental y Trideza, a las cuales se concesionó el servicio de limpia en Cuernavaca, no recolectaron la basura de la ciudad por tercer día consecutivo porque el ayuntamiento capitalino, que encabeza Antonio Villalobos, no ha cubierto pagos pendientes, aseguraron empleados de la primera compañía.
El gobierno municipal concesionó a KS Ambiental y a Trideza la recolección, traslado y disposición final de 560 toneladas de desperdicios que los habitantes de la ciudad generan diariamente, servicios por lo que el ayuntamiento se comprometió a pagar 250 millones de pesos anuales.
Efraín Esaú Mondragón, titular de desarrollo sustentable y servicios públicos de Cuernavaca, afirmó en entrevista que los concesionarios señalaron que dejaron de laborar por carecer de combustible para sus camiones recolectores. Agregó que ya se liquidó parte de la deuda, pero no precisó a cuánto asciende el monto total ni lo que falta cubrir.
Por lo pronto, vecinos de las zonas oriente, centro y norte de la capital informaron que ayer no recibieron servicio de limpia. El lunes, el presidente municipal reconoció que su administración tiene deudas con ambas compañías y prometió saldarlo.
El edil atribuyó a la pandemia de Covid-19 la escasez de recursos para pagar la recolección de desechos, y comentó que el ayuntamiento que encabeza no realiza una “correcta recaudación”.
Protesta por cobros indebidos de agua
Habitantes de colonias de la zona oriente de esta capital, afiliados a la asociación Gustavo Salgado Delgado, se manifestaron ayer ante las oficinas del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (Sapac) para denunciar que pretenden cobrarles una falsa deuda por el servicio de un bimestre y negaron tener pasivos.
“No sabemos si se lo están haciendo a todos los ciudadanos o nomás a nosotros, pero hemos observado que a todos les están poniendo que tienen un bimestre vencido y cobran más caro”, dijo Gabriel Rivas, dirigente de la organización.
Los inconformes entregaron a la corresponsalía de La Jornada copias de 30 recibos del Sapac, en los cuales se acota que los usuarios omitieron pagar un bimestre, pero según Rivas “eso no es cierto, y por eso estamos aquí, para decir al Sapac que no vamos a pagar algo que no consumimos. Es un fraude”.
Cándido Labra, poblador de la colonia Antonio Barona, también acudió a señalar esta irregularidad y se unió a la protesta. Expuso que en el recibo que el Sapac le envió esta semana se le cobra un supuesto bimestre vencido, pese a que está al corriente en sus pagos.