Ciudad de México. Los hogares en Quintana Roo, Ciudad de México, Jalisco, Tlaxcala y Yucatán fueron los más afectados por la pandemia, debido a que en esas entidades federativas se registró la mayor caída tanto de sus ingresos como de sus gastos, revelaron datos de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (Enigh) 2020.
La pandemia marcará un antes y un después tanto en la capacidad de los hogares de mantener sus ingresos como en los hábitos de consumo de la población. Y la fotografía que se tiene del comportamiento de ingreso y gasto por la pandemia es de mucha heterogeneidad en el país.
Las cinco entidades federativas más afectadas, que en su mayoría cimientan su actividad productiva en los servicios y el comercio, sufrieron el paro de sus industrias al ser “no esenciales” en 2020, por lo que sus hogares registraron una caída promedio en sus ingresos de 16.6 por ciento con respecto a 2018.
De acuerdo con datos del empleo, tanto la Ciudad de México como Quintana Roo, están dentro de las entidades más afectadas por la falta de fuentes de trabajo durante la pandemia, por lo que los ciudadanos no tenían para gastar y, por lo tanto, dejaron de consumir, con una caída promedio entre los cinco estados de 20.5 por ciento en el periodo de referencia.
“Uno esperaría que si baja el ingreso también descienda el gasto, pero hubo diferentes reacciones a nivel nacional. Y la Enigh nos mostró un mosaico de heterogeneidad”, afirmó Édgar Vielma, director general de Estadísticas Sociodemográficas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Temor por la pandemia
En entidades como Durango, Chihuahua, Nuevo León, Guanajuato y estado de México, dedicados a la industria, principalmente, tuvieron un cierre temporal de sus actividades el año pasado, por lo que sus ingresos no se vieron tan colapsados, al registrar en promedio un crecimiento de uno por ciento.
Sin embargo, la reacción en los hogares fue que dejaron de gastar al temer una rebaja de ingresos por la pandemia, pues el consumo en los hogares de estas entidades cayó en promedio 12.3 por ciento.
“A pesar de que la pandemia no les generó un impacto significativo en sus ingresos, sí provocó cambios en su gasto. La gente no quiso arriesgarse y prefirió reservar su comportamiento”, explicó Vielma a La Jornada.
Apoyados por la demanda y los avances en las industrias alimentarias, Zacatecas, Oaxaca, Chiapas, Michoacán y Nayarit, entidades federativas en las que mayoritariamente su actividad productiva es la agrícola y la ganadera, los ingresos de sus hogares no se vieron significativamente afectados, al registrar en promedio un crecimiento de 4.2 por ciento en 2020 con respecto a 2018.
De tal forma que también en ese escenario, el gasto de los hogares de estos estados sólo descendió en promedio 1.9 por ciento en el periodo de referencia.
El consumo de alimentos, particularmente, en los hogares registró un crecimiento de 5.8 por ciento, la gente dejó de comer en restaurantes, pero gastó más en comprar zanahorias, carne, cereales, etcétera, lo que ayudó a que el ingreso y gasto de los hogares en las zonas rurales del país y en estados productores del sector agrícola no se vieran sustancialmente afectados como en otras entidades federativas.