En México, 57 mil 490 niñas, niños y adolescentes han dado positivo a Covid-19 en lo que va de la pandemia. Se han confirmado 595 decesos en población de 0 a 17 años, quienes, en su mayoría, desarrollaron complicaciones pulmonares, como neumonía, y presentaban comorbilidades como obesidad, hipertensión, diabetes e incluso tabaquismo.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud (Ssa), en la cuarta semana de julio los casos positivos aumentaron en 2 por ciento (213 casos) para el grupo etario de 0 a 5 años, en 2.4 por ciento (319 casos) para los menores de 6 a 11 años y en 2.5 por ciento (800 casos) para los de 12 a 17 años, respecto a la semana anterior.
El reporte elaborado por el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), con datos del sector salud, agrega que la población adolescente concentra 50.5 por ciento de los nuevos contagios detectados durante la cuarta semana de julio, respecto al total de las notificaciones confirmadas para el grupo de 0 a 17 años.
Por lo que respecta a los 595 decesos confirmados en niños y adolescentes desde el inicio de la pandemia y hasta el pasado 25 de julio, 326 corresponden a menores de 0 a 5 años, 87 a niños de 6 a 11 años y 182 en adolescentes de 12 a 17 años. El perfil de las niñas, niños y adolescentes fallecidos por Covid-19 incluyen diversas comorbilidades.
Destaca que la principal complicación es la neumonía, aunque se presentan también afecciones previas, entre ellas, enfermedades cardiovasculares, inmunosupresión, obesidad, hipertensión, diabetes, falla renal crónica, tabaquismo y otras enfermedades.
Al respecto, la Ssa emitió lineamientos para la prevención, detección y atención de menores con Covid-19 en los que se enfatiza la aplicación de medidas de prevención y detección oportuna de riesgos, pues destaca que el virus puede afectar a niños de todas las edades, incluyendo a los recién nacidos.
Al respecto, las organizaciones de Naciones Unidas para la Salud (OMS), y la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) destacan que los efectos del Covid-19 en la salud física de niños y adolescentes son leves y con menor riesgo de fallecer, pero las consecuencias emocionales y educativas pueden ser “devastadoras, ya que perdieron espacios vitales de convivencia, como las escuelas”, y quedaron expuestos a mayores riesgos de violencia física, sicológica y sexual.
En diversos estudios, la Unesco alertó que la región de América Latina y el Caribe mantiene el cierre más prolongado de escuelas a nivel mundial, lo que tendrá un impacto, no sólo en el aprendizaje, sino en la salud emocional de millones de estudiantes.