La Comisión Permanente del Congreso de la Unión citó ayer a un primer periodo extraordinario de sesiones en el Senado y en la Cámara de Diputados, que se llevará a cabo a partir de este viernes y hasta que concluyan los temas agendados, que son la reforma que amplía el plazo para la entrada en vigor de la mayoría de las disposiciones en materia de outsourcing y la ratificación de los secretarios de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, y de la Función Pública, Roberto Salcedo Aquino.
Se eliminó el tema de los desafueros, aunque Morena abrió la posibilidad de un segundo periodo extraordinario para mediados de agosto, en el que se puedan votar el dictamen para despojar de la inmunidad a dos diputados federales y revisar el caso del fiscal de Morelos.
Durante la sesión de ayer, Morena consiguió el voto de todas las fuerzas políticas, excepto del PAN, con lo cual logró la mayoría calificada para ese primer extraordinario –29 votos a favor y 5 en contra– en medio de un acre debate, en el que de nueva cuenta intercambiaron calificativos de “hipócritas y simuladores” con los blanquiazules que, en momentos, llegaron al insulto.
Durante la discusión en lo particular, senadores y diputados del PAN incluyeron dos reservas, para que la convocatoria al extraordinario incluyera los desafueros, pero fueron desechadas, lo cual encendió más a los de Acción Nacional, que se quedaron solos e insistieron en acusar a los morenistas de dejar impunes a dos legisladores acusados de abuso de menores y de corrupción. Los de la 4T respondieron que fue Acción Nacional quien obstaculizó en dos ocasiones que se llevara a cabo el extraordinario.
Sesión accidentada
La diputada de Morena María de los Ángeles Huerta expresó que el PAN en todo momento trató de proteger al fiscal de Morelos, Uriel Carmona, lo que fue rechazado por el senador blanquiazul Damián Zepeda , quien sostuvo que en dos horas los morenistas “se quitaron la máscara”, al no incluir en la convocatoria de ayer los desafueros, como parte de “un pacto de impunidad” con su aliado el PT.
La senadora Mónica Fernández les reclamó desde tribuna a los panistas que el pasado martes hubieran votado en contra de un periodo extraordinario que incluía el tema de los desafueros, además de las ratificaciones de los dos funcionarios y el plazo a los empresarios a fin de que puedan cumplir con los nuevos ordenamientos en materia de subcontratación. “¡Es de locos!”, señaló y les exigió congruencia
Sin embargo, la senadora panista Kenia López Rabadán, a gritos, insistió en acusar a Morena de impedir que se pueda lleva a la justicia “a un violador” y los llamó “lacayos” de López Obrador y de su “gobierno de porquería”. Planteó una reserva encaminada a que el plazo de un mes a los empresarios del outsourcing se prolongue hasta enero de 2022.
De manera altisonante, la diputada Huerta respondió que los panistas eran simuladores y de paso se refirió a la senadora Xóchitl Gálvez como “medallista en oro de trampas y mentiras”. Cuando concluía su intervención, y se retiraba del micrófono, se le escapó un “pinche vieja” que se alcanzó a oír y que iba dirigido a López Rabadán, quien desde su escaño la interrumpía.
En la accidentada sesión, se dio también una confrontación entre morenistas. El senador Alejandro Armenta reprochó a Rubén Cayetano, diputado de su partido, que hubiera responsabilizado al coordinador Ricardo Monreal de sacar el tema del desafuero. “Cuando la perra es brava, hasta a los de casa muerde”, expresó.
El diputado Cayetano no se quedó callado y reprochó a Monreal de “lanzarle a uno de sus peones” y agregó que él “no es palero ni títere” de nadie. El coordinador de Morena en San Lázaro Ignacio Mier, debió presentarse, para evitar un conflicto interno.
Al final, la Comisión Permanente citó a sesión presencial el 9 de agosto, cuando se podría convocar al segundo periodo extraordinario.