Boston. El ex cardenal Theodore McCarrick, despojado del estado sacerdotal cuando una investigación del Vaticano confirmó que abusó tanto de adultos como de menores, ha sido acusado del violencia sexual contra un adolescente durante una boda en los años 70, de acuerdo con documentos judiciales.

Los papeles obtenidos por el periódico Boston Globe revelan que McCarrick está acusado de asalto indecente con lesiones a un joven de 16 años.

McCarrick es el primer cardenal estadunidense acusado de un crimen sexual contra un menor, de acuerdo con Mitchell Garabedian, conocido abogado de víctimas de abusos sexuales de religiosos que representa a la víctima, quien alega haber sufrido abusos a manos del ex prelado.

“Se necesita una gran valentía de una víctima de abuso sexual para denunciar los hechos y enfrentar un proceso penal”, señaló Garabedian en un correo electrónico en el cual pidió “que se presenten los hechos, se aplique la ley y se pronuncie un veredicto justo”.

Barry Coburn, abogado de McCarrick, declaró: “ansiamos responder el caso en la sala del tribunal”, y se negó a abundar en declaraciones.

Según un documento judicial, el hombre declaró a los investigadores que McCarrick, amigo de su familia, empezó a abusar de él cuando era niño.

El hombre afirma que McCarrick lo manoseó en 1974, al caminar por el campus de la Universidad Wellesley, donde se celebrada la boda de su hermano. Alega que el religioso lo llevó a una sala y lo manoseó para luego decirle: “reza tres padrenuestros y un avemaría, o tal vez un padrenuestro y tres avemarías, para que Dios pueda absolverte de tus pecados”, indican los documentos.

Despojado del estado sacerdotal hace dos años

En 2019, el papa Francisco despojó del estado sacerdotal a McCarrick, de 91 años, cuando una investigación del Vaticano confirmó rumores que circulaban desde hace décadas de que era un depredador sexual.

El caso generó una crisis de credibilidad a la Iglesia católica, ya que desde 1999 el Vaticano tenía informes de cardenales influyentes sobre la conducta problemática de McCarrick, quien sin embargo fue cardenal, elector y emisario de la “diplomacia blanda” de la santa sede.