Ciudad de México. Mundanos, “no es una banda”, sino “un laboratorio, experimento o colectivo”, en el que los músicos viven la magia y la pasión de sus ejecuciones, con la única finalidad de crear y ser felices.
Así lo expresaron el guitarrista Ismael Frausto y el cantautor español José Riaza, quienes junto con la cantante Julieta Soto, el bajista Ray Growl y el baterista Ángel Bermúdez integran la agrupación de artistas independientes reunidos “con el infinito placer de hacer música sin complicaciones, pretensiones o géneros predeterminados”.
Riaza sostuvo: “El tema es disfrutar la música, no encasillarnos con el concepto de banda, pues estaríamos atados los unos a los otros; además, tendría que haber un líder, trabajar cierta imagen, pero cuando formamos un colectivo, si bien, hay un cantante o dos, o los que queramos, puede ser un rol rotativo para que no pese tanto la vida, nos divirtamos y eso es la felicidad que ejercemos como artistas”.
Mundanos lanzó su primer sencillo –de título homónimo al nombre del colectivo– que se encuentra disponible en plataformas digitales. La idea de los músicos es continuar creando, sin planear o pensar en el futuro; someter a consenso las ideas y tomar decisiones de manera democrática, pero sin líderes que impongan sus visiones particulares. Su lema sería “todos queremos lo mismo” y su espíritu fraterno y creativo rondaría la unidad de una comuna jipi.
Frausto retomó: “La idea de no ser una banda es no ser todo lo que se repita de nuestras historias personales y de los demás grupos; es decir, el asunto de los grupos es una burocracia y cuando surgió este laboratorio creativo platicamos nuestras experiencias horrendas y coincidimos en que no queríamos que se repitieran nunca”.
De hecho, prosiguió, “la música que hemos tocado a lo largo de nuestras vidas tiene un poco de contestatario, revolucionario y de no estar de acuerdo con el statu quo; en congruencia con esto, por qué tendríamos que ser una banda; además, no nos interesa pelear por ser exitosos, tener millones de seguidores en redes sociales, lo que queremos es hacer música, lo cual nos vuelve felices”. La realidad, comentaron divertidos, “es que queremos ser libres y absolutamente promiscuos”.
Sin prejuicios
Mundanos, enfatizaron, “cree en la filosofía del DIY (Do It Yourself o hágalo usted mismo). En este laboratorio todo es realizado por sus integrantes, desde la composición y arreglos hasta la producción, mezcla y masterización de sus canciones que pueden ir desde un tema pop a un blues o una ranchera sin el menor empacho o prejuicio”.
Así “como disfrutamos el nacimiento de Mundanos, lo hicimos con el proceso de creación y construcción del sencillo, a partir de colaboraciones a distancia, decidimos trabajar juntos”, sostuvo Frausto.
Incluso, “como no estamos atados a nada, tampoco nos circunscribimos a un género, por qué negarte a tocar punk, ranchera o blues sólo por afán de ponerle una etiqueta a tu producto”.
El mensaje de la canción, autoría de Riaza, es de hermandad, paz y amor: “Todos en el tren de los tristes queremos ser más felices. Cambiemos las directrices, todos queremos lo mismo…”
Otro aspecto, que caracteriza al colectivo, explicó el cantautor español, es que “no pensamos mucho en el futuro, sino en el presente; tenemos que caminar con calma, dar pasos firmes. Lo que nos urge es tocar en vivo y ya hay una selección de canciones para un show de 45 minutos”.
Ismael Frausto comentó: “Si tratamos de encontrar diversión en este proyecto, sabemos que nuestra obligación es divertir al público; muchas veces al artista se le olvida que la gente paga para pasar un buen rato”.
Con el rock y el pop como punto de partida, esta “no banda” se despreocupa del sendero por el que la lleve la creación y se aboca a producir lo que les sale del alma, en busca de transmitir un mensaje que conecte con una audiencia cada vez más diversa y global.
“Tenemos algunas canciones que son divertidas, porque tampoco estamos planteando mensajes sofisticados, pero en el caso de Mundanos, habla de la empatía y la felicidad de todos, como punto de encuentro en la sociedad; aborda el tema de la unidad, que bajemos la voz y escuchemos a las minorías”.
Para la realización del video, los músicos “hicieron a un lado sus actividades cotidianas a fin de transformarse en su álter ego y grabar un ácido audiovisual en el que lo mismo conviven Dios y el Diablo que un mago y una bruja… Todos en el tren de los tristes queremos ser más felices. Cambiemos las directrices, todos queremos lo mismo”.