Durante la tercera ola de Covid-19, los niños y adolescentes no han tenido una mayor afectación en comparación con lo que sucedido desde el inicio de la pandemia, aseguró Alejandro Serrano, director del Instituto Nacional de Pediatría (INP), aunque según la estadística oficial, entre marzo y julio casi se duplicó el número de casos en este sector de la población.
El INP no está entre los nosocomios que atienden a enfermos de Covid-19, pero ha recibido alrededor de 330 afectados, de los cuales 40 estuvieron internados. En las últimas ocho semanas han hospitalizado a alrededor de 30, ninguno de gravedad.
El funcionario aseguró que el pasado lunes, de las cinco camas disponibles para enfermos de Covid-19, solamente dos estaban ocupadas, lo que da cuenta de que hay contagios, pero nada que implique una saturación hospitalaria.
Puntualizó que en el INP los espacios son pocos porque la estrategia para hacer frente a la pandemia determinó que los niños y adolescentes menores de 18 años con Covid-19 se atendieran en el Hospital Infantil de México Federico Gómez (HIMFG).
No obstante, al Instituto de Pediatría han llegado niños con la sospecha de tener el coronavirus. La mayoría de los casos positivos se han referido al Infantil de México. “Acá sólo se han quedado los pacientes que por sus condiciones de salud no ha sido posible su traslado”, explicó Serrano.
En tanto, los datos oficiales señalan que el número de niños con Covid-19 pasó de 87 mil, en marzo, a 160 mil registrados hasta ayer.
La mayoría de los afectados han tenido un manejo ambulatorio y de acuerdo con los datos oficiales, a partir de que se declaró la emergencia sanitaria y hasta ahora, alrededor de 6 mil han requerido hospitalización.
En entrevista, el director del INP comentó que aunque este nosocomio no es Covid-19, destinó un área específica para recibir a los casos sospechosos. Se les realiza la prueba y, de salir con resultado positivo, se les prescriben los tratamientos y regresan a su casa. De ser necesario, se les hospitaliza para su estabilización y posterior traslado al HIMFG.
Esto ha sido así porque el INP ha mantenido abiertos los servicios para la atención de personas con otros padecimientos. Resaltó que el área de cuidados intensivos cuenta con 41 ventiladores, de los cuales el lunes estaban ocupados 12. De éstos, sólo dos eran pacientes de Covid-19.
El resto son niños con males diversos del sistema nervioso central, postoperados de corazón y con trasplante de órganos, entre otros que, por las características de las intervenciones quirúrgicas, pasan de 24 a 48 horas en el área de terapia intensiva.
Respecto a la pandemia de Covid-19, Serrano comentó que en la tercera ola en curso, al INP han llegado alrededor de 60 casos sospechosos, de los cuales poco más de la mitad tuvo un resultado positivo en la prueba de detección.
En cuanto a los fallecimientos, comentó que desde marzo de 2020 en el instituto han ocurrido 40 decesos y el más reciente se registró hace tres meses. Era un niño con obesidad y diabetes, explicó el funcionario.