La Terminator australiana terminó con el dominio de Katie Ledecky en los Juegos Olímpicos. Ariarne Titmus alcanzó y superó a Ledecky para quedarse con una de las competencias más anticipadas de la justa olímpica, colgándose el oro con el segundo mejor tiempo de la historia.
Titmus, quien se encontraba casi un cuerpo detrás de la estadunidense luego de cuatro de las ocho vueltas en los 400 metros libres, aceleró en los últimos 100 metros para terminar con un tiempo de 3 minutos 56.69 segundos.
Ledecky era la campeona olímpica defensora y poseedora del récord mundial. Se conformó con la plata en esta ocasión con 3:57.36, el cuarto mejor crono de la historia. El bronce fue para la china Li Binjie, con 4:01.08, marca continental de Asia.
“Luché con uñas y dientes”, expresó Ledecky; “ella definitivamente tuvo una competencia muy inteligente. Estuvo muy controlada desde el principio. Me sentía bien y fuerte y di la vuelta en los 300 y pensé, ‘oh, está aquí’.”
Por primera vez en su brillante carrera olímpica, Ledecky probó el sabor de la derrota, superada por una australiana que dejó en claro que la estrella estadunidense no puede intimidarla.
El primer oro del día en natación fue para la canadiense Margaret Macneil, en la prueba de 100 metros mariposa femenino con 55.59, nuevo récord continental de América. La china Zhang Yufrei logró plata con 55.64 y la australiana Emma McKeon, bronce con 55.72
En 100 metros braza masculino, el británico Adam Peaty se proclamó campeón con 57.37. Arno Kamminga, de Países Bajos, ganó plata con 58; el italiano Nicolo Martinenghi fue medalla de bronce con 58.33.
En relevos 4x100 estilo libre masculino, el equipo de Estados Unidos ganó el oro con tiempo de 3:08.97. Italia se quedó la plata con 3:10.11 y Australia, que estuvo cerca del segundo lugar, pero tuvo que conformarse con el bronce con 3:10.22.
En las semifinales de 100 metros espalda, la estadunidense Regan Smith implantó marca olímpica con tiempo de 57.86. Es la cuarta eliminatoria consecutiva en la que se rompe un récord.