La Asociación Mexicana de Periodistas Desplazados y Agredidos solicitó medidas extraordinarias a la coordinación nacional del Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas para el comunicador yucateco Erick Manzanilla, quien el 30 de marzo pasado fue amenazado de muerte y a la fecha continúa siendo acosado y agredido por su labor en un medio local.
Manzanilla señaló que los ataques han sido por parte de la policía estatal y denunció que el viernes pasado tanto él como su familia fueron agredidos por presuntos elementos de esta corporación.
Indicó que lo anterior surge a partir de la cobertura que ha realizado ante la prohibición a los ciudadanos de transitar por las calles de Yucatán después de las 11 de la noche, para evitar contagios de Covid-19, pero se exime a quienes lo hagan por motivos de salud, de emergencia, vigilancia, medios de comunicación, entre otros. “Encontramos situaciones irregulares, que están grabadas, actos presuntamente delictivos por parte de la policía”.
Manzanilla expuso que el viernes pasado su esposa e hija fueron interceptadas por sujetos armados, quienes dijeron que eran policías estatales. El hecho, añadió, ocurrió mientras ellas tomaban fotos de un deportivo. “Se las llevaron con rumbo desconocido” y tiempo después las regresaron.
Mencionó que lo anterior sucedió cuando él cubría el reporte de la ejecución de un policía estatal uniformado, y cuando se trasladó al deportivo también fue agredido al igual que su hijo.
Señaló que aunque usó el botón de asistencia que le otorgó el Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas “no sirvió de nada, la Guardia Nacional sólo llegó porque marcamos a número directo”.
Manzanilla informó que tras lo sucedido el viernes, representantes del mecanismo se comunicaron ayer con él para avanzar en un plan para su protección.
