La Paz. Un ex comandante en jefe del Ejército de Bolivia quedó en prisión preventiva este viernes por los enfrentamientos entre civiles y militares tras la renuncia de Evo Morales a la presidencia en 2019, informó su abogado.
El general Iván Inchauste, que fue jefe del Ejército entre fines de 2019 y principios de 2020, fue ingresado de manera preventiva por seis meses a prisión tras una audiencia judicial, indicó su abogado René Villarroel.
"El juez cautelar dispuso la detención preventiva de mi defendido, el general Inchauste", señaló el abogado defensor, quien dijo que la Fiscalía lo acusa por los presuntos delitos de "homicidio y lesiones graves".
El militar fue detenido el jueves, pero este viernes quedó en prisión preventiva tras la audiencia.
El ex jefe militar es investigado por los violentos enfrentamientos del 19 de noviembre de 2019 afuera de la planta de gas de Senkata, en la ciudad de El Alto, vecina de La Paz, que dejaron 10 muertos y 31 heridos.
Días después hubo otros hechos violentos en el poblado de Sacaba, en la región central de Cochabamba, que dejaron nueve civiles muertos.
Los incidentes dejaron en total unos 35 muertos, según investigación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), y comenzaron con protestas de opositores a Morales (2006-2019), que denunciaban fraude en las elecciones de octubre de 2019, en las que buscaba su cuarto mandato.
Morales dimitió y le sucedió la derechista Jeanine Áñez, quien está en cárcel preventiva desde marzo pasado, junto a dos de sus ex ministros por los incidentes de 2019.
Este viernes otro jefe del estado mayor de las Fuerzas Armadas, general Pablo Arturo Guerra, también fue detenido por el caso de Senkata.
Hasta la fecha hay 10 militares acusados por la Fiscalía por la violencia social de fines de 2019. Ocho están con detención, carcelaria o domiciliaria, y dos están siendo buscados.
El oficialismo insiste que Morales fue víctima de un "golpe de estado".