Tokio. El comité organizador de los Juegos Olímpicos de Tokio despidió al director de la ceremonia de apertura, Kentaro Kobayashi, debi-do a una broma sobre el Holocausto que hizo durante un programa de comedia en 1998.

“Nos enteramos que el señor Kobayashi, en su presentación, usó una frase que ridiculizaba una tragedia histórica”, dijo Seiko Hashimoto, presidenta del comité.

“Nos disculpamos profundamente por causar esta situación un día antes de la ceremonia de apertura y generar problemas y malestar a muchas partes involucradas, así como a la gente de Tokio y al resto del país”, añadió la funcionaria por la broma “Juguemos al Holocausto” que hizo Kobayashi en su acto de comedia.

Kentaro se disculpó en una carta al reconocer que fue “extremadamente imprudente. Entiendo que elegí mal las palabras en ese momento y es un error que lamento”.

Poco después que un video y la transcripción de la presentación de Kobayashi fue revelada, las críticas abundaron en las redes sociales.

El ministro de Exteriores de Japón, Motegi Toshimitsu, las tachó de “profundamente ofensivas e inaceptables” y señaló, en un comunicado, que “la tragedia del Holocausto fue una atrocidad sin precedentes en la historia de la humanidad.

“Atenta contra el valor de la unidad al que aspiran los Juegos Olímpicos y Paralímpicos”, así como contra el “objetivo de conseguir una sociedad donde todos podamos vivir en armonía”.

“Cualquier persona, sin importar cuán creativa sea, no tiene derecho a burlarse de las víctimas del genocidio nazi”, dijo el rabino Abraham Cooper, decano adjunto y director de acción social global del Centro Simon Wiesenthal, grupo defensor de los derechos humanos en Los Ángeles.

“Todo vínculo de esta persona con los Olímpicos de Tokio insultaría la memoria de 6 millones de judíos y sería una broma cruel de los Juegos Paralímpicos”, añadió.

A inicios de esta semana, el compositor Keigo Oyamada, cuya música iba a ser usada en la ceremonia, debió renunciar tras ser duramente criticado por hostigar a sus compañeros de clase durante su infancia, incluyendo aquellos con discapacidad.

Antes, Yoshiro Mori renunció como presidente del comité organizador por comentarios sexistas.

La ceremonia de apertura en el Estadio Olímpico se realizará sin espectadores y con 950 personas entre atletas, dirigentes, invitados y periodistas, informó Hidemasa Nakamura, jefe del centro de operaciones de Tokio 2020.

Al ser consultado por la cifra de 87 infectados de Covid-19, dijo que deshacerse por completo del virus es “extremadamente difícil”, por lo que era importante identificar y aislar rápidamente cualquier nuevo caso.

La inauguración se realizó sin espectadores y estuvo encabezada por el emperador Naruhito, icónica figura para Japón. La ceremonia fue sobria con un show tecnológico que incluyo imágenes del globo terráqueo y la letra de la canción Imagine proyectadas en el cielo.