La Habana. Cuba cuestionó ayer la voluntad de Estados Unidos de reanudar las remesas a la isla sin eliminar las restrcciones impuestas por el gobierno de Donald Trump, y calificó de “perversa campaña” la divulgación en redes sociales de listas de cientos de “desaparecidos e incomunicados” luego de las protestas del pasado día 11.
“Si Estados Unidos desea ayudar al pueblo cubano podría eliminar el límite de las remesas a mil dólares por trimestre, la suspensión de las no familiares, la prohibición de envíos desde terceros países a través de Western Union y la imposibilidad de tramitarlas mediante Fincimex y AIS (ambas empresas cubanas)”, tuiteó el canciller Bruno Rodríguez.
La Casa Blanca anunció antier que estudia la prohibición de remesas a Cuba, y ordenó al Departamento de Estado la creación de un grupo de trabajo para revisar esa política, sin que salga beneficiado el “régimen” (https://bit.ly/3xYDR9Z)
El jefe de la diplomacia cubana denunció además que Estados Unidos ejerce brutales presiones sobre gobiernos de un grupo de estados de América Latina para forzarlos a sumarse a una proyecto de declaración condenatoria contra Cuba. En un tuit, Rodríguez emplazó al secretario de Estado, Antony Blinken, a reconocer o desmentir las presiones que ejerce sobre terceros países para tal fin.
El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, calificó de “perversa campaña” la andanada de mensajes en redes sociales que publican listados con nombre de personas “desaparecidas” tras los diturbios del día 11.
“Se esclarecen los hechos, se ofrece amplia información y se desmonta otra perversa campaña contra la revolución cubana”, tuiteó el mandatario, y puso el vínculo a una amplia nota sobre el tema en Granma, que informó sobre lo dicho en el programa de televisión Hacemos Cuba.
Ahí, el coronel Víctor Álvarez Valle, del Ministerio del Interior, aseveró que “en Cuba no existen personas desaparecidas ni torturadas” relacionadas con los sucesos del 11 de julio, ni con ningún otro caso. “No existe en la isla un lugar al cual usted pueda llevar a un detenido fuera de los procedimientos y de las cuestiones que establece la ley”.
En el mismo programa participó José Luis Reyes, jefe de Supervisión de la Dirección de Procesos Penales de la fiscalía general.
Ambos funcionarios rechazaron las listas de personas supuestamente desaparecidas que aparecen publicadas en redes sociales y que, según Granma, forman parte de “la operación político-comunicacional alentada y pagada por el gobierno de Estados Unidos contra Cuba.
“Nosotros tenemos como principio en la revolución, y es también lo que caracteriza la actuación de las autoridades, el derecho a la vida, a la libertad, a la preservación y la seguridad de las personas”, sostuvo el coronel Álvarez, quien recordó que Cuba es firmante de la Convención Internacional para la protección de todas las personas contra las desapariciones forzadas.
Álvarez reconoció que sí hubo detenciones, pero aclaró que se liberó a quienes no se pudo comprobar que hayan participado en los disturbios, mientras se sigue un proceso judicial para casos específicos, de lo cual no dio detalles. Reyes declaró que 63 personas se acercaron para poner quejas o preguntar por los arrestos.
En el programa televisivo se presentó el testimonio de Ramón Samada, presidente del Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográfico, quien desmintió estar desaparecido, pues su nombre está en las listas elaboradas desde Miami.
Johana Tablada, subdirectora del área de Estados Unidos en la cancillería, criticó una serie de declaraciones que hichieron altos funcionarios de Washington tras las protestas en la isla y consideró que las mismas están encaminadas a justificar una intervención militar.
“Hay una narrativa de Walt Disney del gobierno malo y del pueblo que lucha por su libertad, estereotipos que asustan a cualquier persona que haya puesto alguna vez los pies en Cuba, por su arrogancia y el desprecio a la verdad”, señaló Tablada en entrevista con la agencia de noticias Ap.
“Están muy interesados en fabricar una realidad alternativa porque no alcanzaron los disturbios del 11 de julio para justificar la guerra que se nos hace”, expuso.
Del lado de Washington, el vocero del Departamento de Estado, Ned Price, comentó que el gobierno del presidente Joe Biden confía en que tiene más margen para emitir sanciones contra Cuba en el contexto de su respuesta a las protestas que han tenido lugar en la isla.