Ciudad de México. Por primera vez en cinco años los ingresos de Petróleos Mexicanos (Pemex) rebasaron su carga tributaria. Con datos acumulados a mayo se observa que en 2021 las ventas de la petrolera han sido 35.1 por ciento mayores a lo que ha entregado por derechos y enteros al gobierno federal.
Sin embargo, la reducción en la carga tributaria de la petrolera no resuelve otro flanco: los ingresos de la empresa no logran cubrir sus gastos. Estos últimos han sido 30.3 por ciento mayores respecto de lo que logró percibir entre enero y mayo de este año, exhibe la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
La administración federal actual, además de inyecciones de capital, ha procurado una reducción tributaria a Pemex, considerada a escala mundial entre las petroleras más castigadas con impuestos. En febrero pasado se publicó un decreto en el que resolvió reducir la tasa del derecho de utilidad compartida (DUC) de 58 a 54 por ciento por lo que resta del año.
La baja en el DUC durante 2021 sigue a una disminución en la tasa 65 a 58 por ciento resuelta el año pasado. Adicionalmente, en el mismo decreto de febrero se consideró un crédito fiscal por 73 mil 280 millones de pesos. Ambas políticas tienen el objetivo de liberar recursos para incrementar la inversión en actividades de exploración y producción de hidrocarburos.
Los datos públicos muestran que en mayo los ingresos brutos de Pemex ascendieron a 359 mil 46.4 millones de pesos, de los cuales 217 mil 770.4 fueron ingresos para la empresa y 141 mil 276 millones a derechos y enteros, rubro bajo el que se concentra la carga tributaria de la petrolera.
Con ello, el peso fiscal representó 39.3 por ciento de los ingresos brutos de la empresa, la menor proporción desde los primeros cinco meses de 2002, cuando llegó a 37.8 por ciento. En los extremos de este indicador, en mayo de 1977 la carga tributaria representó 26.2 por ciento de los ingresos brutos de Pemex, mientras en el periodo comparable de 2008 alcanzó 88.8 por ciento, muestran los datos de Hacienda.
El decreto emitido por el presidente Andrés Manuel López Obrador recuerda que las reducciones de impuestos tienen “el propósito de liberar recursos a Petróleos Mexicanos para la inversión en exploración y extracción de hidrocarburos, lo que le permitirá reponer las reservas e impulsar la producción de petróleo”.
Los datos de mayo muestran que el gasto de la empresa alcanzó 312 mil 510.7 millones de pesos, por arriba de los 255 mil 402.9 millones reportados en el periodo comparable del año pasado.
Según los datos disponibles para 2021, 25.6 por ciento de lo ejercido ha ido a gastos de operación, 52 por ciento a inversión y 22.4 por ciento al pago de los intereses de la deuda. Estos mismos rubros, se comparan con 30.5 por ciento en operación del año pasado, 46.2 por ciento de inversión y 23.3 por ciento al pago de los intereses de la deuda.
Sin embargo, en ese mismo periodo, los ingresos de 217 mil 770.4 millones de pesos no evitaron que la empresa productiva del Estado reportara un balance primario de menos 24 mil 890.8 millones de pesos; una vez considerado el pago de intereses, este creció a -94 mil 740.3 millones de pesos.
Desde el sector financiero varias han sido las advertencias de que son necesarias medidas adicionales. Arnulfo Rodríguez y Carlos Serrano, economista de BBVA, explicaron que “esta reducción en la carga fiscal de Pemex se traduce en mayores presiones fiscales para el gobierno federal.
“En nuestra opinión, resulta cuestionable que durante los siguientes años Pemex pueda recibir paquetes de apoyo financiero similares a los de 2020 y 2021. Para mejorar sus finanzas de una manera permanente, la empresa productiva del Estado tendrá que controlar mejor su gasto operativo y enfocar su inversión en los campos petroleros más productivos.”