Bácum, Son., Ocho integrantes de la etnia yaqui fueron reportados como desaparecidos luego de que sujetos armados los secuestraron el 14 de julio en los ranchos Agua Caliente y El Coyote de la comunidad Loma de Bácum, en el sur de Sonora.
En respuesta, la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas emitió fichas con sus rostros y rasgos generales, y la Fiscalía General de Justicia del Estado negó los hechos.
Los plagiados son Leocadio Galaviz Cruz, de 38 años de edad; Juan Justino Galaviz Cruz, de 28; Benjamín Pórtela Peralta, de 65; Heladio Molina Zavala, de 44; Fabián Sombra Miranda, de 34; Martín Hurtado Flores, de 53; Fabián Valencia Romero, de 27, y Artemio Arballo Canizález, de 60 años de edad.
Dirigentes de la etnia acordaron no hacer declaraciones para evitar represalias contra los desaparecidos, los voceros y las familias yaquis. Solicitaron a quienes tengan información la compartan con las autoridades sonorenses.
Pobladores de Loma de Bácum manifestaron que los desaparecidos salieron a comprar reses para las fiestas tradicionales de la Virgen del Carmen, que se celebran del 14 al 16 de julio en el rancho Bataconsica.
Relataron que, según testigos, un comando sorprendió a los yaquis cuando regresaban, los subió a vehículos y prendieron fuego a una vaca.
Agregaron que autoridades tradicionales analizan cuatro líneas de investigación: las negociaciones sobre el nuevo trazo de un gasoducto que atravesará tierras yaquis, la lucha para evitar la operación del acueducto Independencia, amenazas recientes de efectivos del Ejército Mexicano y un pleito por predios concesionados a particulares. Esta última es la teoría principal, pues la disputa ocurre en el área donde se cometió el secuestro.
La semana anterior, líderes yaquis se declararon en emergencia máxima por actos intimidatorios de militares que irrumpieron en territorio indígena e intentaron desarmar a la tropa de Loma de Bácum, con el pretexto de un decomiso de 487 kilogramos de metanfetamina en el poblado El Papalote de Abajo.
Entre mayo y junio pasados, agrupaciones delictivas asesinaron a tres líderes de la tribu: Agustín Valdez, Luis Urbano Domínguez y Tomás Rojo Valencia.