Zacatecas, Zac.,Tras cuatro años de recorrido en bicicleta por 15 países latinoamericanos, el ciclista uruguayo Tabaré Alonso ahora atraviesa Zacatecas, territorio peligroso por la guerra entre cárteles del narcotráfico.
En marzo de 2017, el pedalista salió de Uruguay con la intención de recorrer 30 mil kilómetros en bicicleta hasta llegar a Alaska, misión que espera concluir en unos cinco meses; un reto adicional, refiere, fue la pandemia de Covid-19.
Durante su recorrido, Tabaré es arropado por pedalistas locales, campesinos y obreros de todo el país, quienes le dan alojamiento y alimentación. En sus cuentas de Instagram y Facebook narra su periplo diario.
Actualmente cruza por Zacatecas, donde gran parte de la población está sometida a la violencia de los cárteles Jalisco Nueva generación (CJNG) y de Sinaloa.
“El primer día, en (el municipio de) San Pedro Piedra Gorda, estaba bajo un puente esperando que pasara la lluvia. A los pocos minutos llegaron a toda velocidad dos patrullas con policías y me gritaron: ‘¡Contra el muro! ¡Arroja al suelo todo, manos arriba!’
“En ese momento –señala el pedalista– pensé: pa’ su madre. Uno de ellos se percató de mi bicicleta, de mi bandera y la placa Uruguay-Alaska, y de mis amigos que estaban a un costado y siguieron su camino”. En esa ocasión procedía de Aguascalientes y al final los agentes lo dejaron marcharse.
Bajo la lluvia, que en días no ha parado, Tabaré Alonso pasó por Jerez y subió hacia las comunidades rurales, donde descubrió poblados semivacíos, con gente que ha padecido la violencia criminal y, sin embargo, con él se mostraron amistosos.
“En Zacatecas todos los días veo arcoíris… En ranchos olvidados y azotados por la codicia de algunos pocos que hacen tanto mal a los millones de corazones que sólo quieren vivir en silencio por las noches, cansados de escuchar los estruendos (de los fusiles y pistolas).”
Tabaré Alonso documenta su viaje con cientos de fotografías de los lugares que visita y graba videos cortos con la ayuda de sus acompañantes temporales. En uno de ellos cruza por la comunidad de Palmas Altas, casi abandonada. En la pared de una humilde casa se ve la pinta: “Territorio CJNG”.
Con optimismo, el ciclista uruguayo dice que sólo le falta recorrer ocho entidades: San Luis Potosí, Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila, Chihuahua Durango y Sinaloa, para luego subir a Sonora, antes de llegar a Los Ángeles, California y después cruzar 32 territorios de Estados Unidos y, luego de varias semanas, llegar a Alaska.