Un juez de control federal en Ciudad de México dictó auto de formal prisión a Luis Cárdenas Palomino, ex director de Seguridad Regional de la extinta Policía Federal (PF), a quien se le imputa el delito de tortura contra Mario Vallarta Cisneros y su sobrino Sergio Cortez Vallarta, así como de los hermanos Eduardo y Ricardo Estrada Granados, para obligarlos a aceptar que formaban parte de la banda de secuestradores identificada como Los Zodiaco.
Durante la audiencia vía remota, que se enlazó a las instalaciones del Poder Judicial de la Federación localizadas en el Centro Federal de Readaptación Social número 1, en Almoloya de Juárez, con la sede del Reclusorio Oriente, Jesús Alberto Chávez, titular del juzgado duodécimo de distrito de procesos penales federales, determinó que la Fiscalía General de la República (FGR) aportó las pruebas suficientes para procesar al ex mando policiaco, quien fuera cercano colaborador de Genaro García Luna, preso en Estados Unidos por narcotráfico.
Por ello, Cárdenas Palomino permanecerá privado de la libertad en el penal federal del Altiplano, en el estado de México, por tiempo indefinido, debido a que el delito de tortura está tipificado como grave en el sistema de justicia tradicional; sin embargo, tiene tres días de plazo para apelar esta medida cautelar.
Quienes acusan al ex mando policiaco de ordenar que los torturaran son familiares del presunto líder de dicho grupo delictivo, Israel Vallarta, sujeto a proceso y quien busca ser liberado, ya que denuncia haber sido objeto de violaciones a sus derechos y que para su aprehensión la PF realizó un montaje, en el que también fue involucrada la ciudadana francesa Florence Cassez, quien quedó en libertad porque la Suprema Corte consideró que las autoridades policiacas violaron el debido proceso.
En conferencia de prensa, Héctor Pérez Rivera, abogado de las víctimas, señaló que solicitarán al Ministerio Público que peritos independientes apliquen de nuevo el Protocolo de Estambul, instrumento internacionalmente adoptado para identificar casos de tortura, a los inculpados, con el fin de reforzar la acusación contra el ex funcionario.
Añadió que, durante la declaración preparatoria de Cárdenas Palomino, su defensa legal exhibió como prueba a su favor un testimonio notarial de los “amplios reconocimientos” que recibió en su etapa como funcionario y alegó que el delito que se le imputa no estaba vigente en la ley cuando sucedieron los hechos.
Reiteró que por este caso ya hay una persona en proceso de sentencia, pero que aún está pendiente la detención de 11 ex policías federales. “Muchos han presentado amparos, algunos han sido desechados por el Poder Judicial e incluso varios son prófugos de la justicia”.
El lunes de la semana pasada Cárdenas Palomino fue detenido en su domicilio de Paseos del Bosque, estado de México, en cumplimiento de una orden de aprehensión girada desde el 24 de septiembre de 2020. Según las investigaciones, los denunciantes del ex mando de la AFI fueron capturados el 27 de abril de 2012 en la Ciudad de México y obligados a declarar que formaban parte de la organización delictiva.