Morelia, Mich., El gobierno estatal, encabezado por el perredista Silvano Aureoles Conejo, quien concluirá su mandato el próximo 30 de septiembre, dejará un déficit de 5 mil millones de pesos para fin de año y una deuda pública de 22 mil millones, afirmó el mandatario electo de Michoacán, el morenista Alfredo Ramírez Bedolla.
“No se justifica que pretenda vender varios inmuebles del estado a más de dos meses de que concluya su administración”, reprochó al referirse a las seis propiedades con valor de casi 427 millones de pesos que están por subastarse, luego de que el Congreso local aprobó en comisiones la desincorporación de las antiguas instalaciones de la Feria en Morelia y del antiguo penal de la capital, entre otras.
El 24 de noviembre de 2020 la Legislatura estatal aprobó la iniciativa de Aureoles Conejo para contratar deuda por 4 mil 90 millones de pesos a fin de realizar obras públicas, aunque sólo se sabe de tres.
En sólo siete meses, del 13 de septiembre de 2018 al 26 de abril de 2019, su administración contrató deuda pública de corto plazo por 3 mil 900 millones de pesos, sin que se haya aclarado en qué se gastó, según la bancada de Morena. “Por ser de corto plazo debió pagarse en su totalidad tres meses antes de que concluya la administración”, advirtió.
Alfredo Ramírez Bedolla recordó el déficit que desde hace años arrastra el gobierno michoacano, de aproximadamente 5 mil millones de pesos. Después de noviembre se agota el presupuesto y no hay para pagar sueldos ni aguinaldos en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo y otras instituciones de educación media superior y superior, y tampoco para sueldos y prestaciones de la burocracia.
