San Cristóbal de Las Casas Chis., Un grupo denominado Autodefensas del pueblo El Machete reivindicó este sábado la incursión efectuada en la cabecera municipal de Pantelhó el miércoles pasado, y advirtió que su objetivo es “expulsar a los sicarios, a los narcotraficantes y al crimen organizado”, pues “no queremos más muertes para los pobres campesinos tzeltales y tzotziles”.
Primero en un comunicado y luego en una videograbación en la que aparecieron cinco hombres armados, la organización manifestó: “Nuestra paciencia se acabó, porque en el gobierno federal y estatal no vemos ninguna esperanza; ante el dolor por tanta sangre derramada tomamos el rumbo de nuestra historia”.
La agrupación aclaró que “una vez que Pantelhó esté libre del crimen organizado encabezado por Raquel Trujillo Morales (sic) el perredista electo alcalde, y narcotraficantes, nosotros como autodefensas del pueblo nos retiramos, porque no buscamos el poder ni el dinero”.
Reiteró: “Una vez libre el pueblo de Pantelhó dejamos en manos de los agentes y comisariados de cada comunidad para que elijan a sus autoridades desde nuestros usos y costumbres, no por partidos políticos que han dividido y confrontado al pueblo y traído muchos muertos”.
El 7 de julio, hombres armados irrumpieron en la cabecera del municipio indígena ubicado en los Altos de Chiapas, luego de un enfrentamiento a balazos contra integrantes del grupo contrario, Los Herrera, presuntamente vinculado con las autoridades municipalesperredistas.
Ese día por la tarde ingresaron al municipio decenas de militares y agentes de la Guardia Nacional y estatales, que un día después fueron emboscados a cuatro kilómetros del centro cuando pretendían desbloquear la carretera Pantelhó-San Cristóbal, cuatro soldados y cinco policías estatales quedaron heridos de bala; dos patrullas de la policía estatal fueron quemadas. Las autoridades no han dado a conocer quiénes los atacaron.
Las denominadas Autodefensas del pueblo El Machete explicaron que “desde hace 20 años comenzó nuestro sufrimiento y poco a poco fueron tomando (poder) los que oprimen al pueblo, pero fue en 2002 cuando Austreberto Herrera Abarca se quiso autonombrar juez municipal de Pantelhó.
“Él le abrió las puertas al crimen organizado, a los narcotraficantes y así comenzó a matar a los que se oponían a sus actividades; vemos que ha matado a un aproximado de 200 personas”.
Aseguraron que “al principio lo denunciamos, pero el agente del Ministerio Público nunca tomó en cuenta nuestras denuncias y algunos de nuestros compañeros fueron asesinados por denunciar la violencia que estamos viviendo.
“En 2019 fue detenido Austreberto, pero la violencia no se terminó; sus hijos, Daly de los Santos Gutiérrez Herrera y Rubén Gutiérrez Herrera, continúan con el crimen organizado hasta la fecha”.
“No hay justicia, por eso dijimos: ‘ya basta’”
Expresaron que “desde hace varios años somos testigos de los asesinatos que le han hecho a nuestros abuelos, padres e hijos. Hemos visto cómo nos roban y despojan nuestros bienes. Ante todo esto que ha sucedido no vemos nada de justicia por parte del gobierno federal y estatal. Por estos hechos dolorosos fuimos platicando y reflexionando que debemos defender la vida de nuestras comunidades. Así, poco a poco en el silencio fuimos formando las autodefensas para nuestro pueblo y el 7 de julio decidimos entrar en el pueblo de Pantelhó, a las 4 de la madrugada, no para atacar al pueblo, sino para expulsar a los sicarios, a los narcotraficantes, al crimen organizado”.
Afirmaron que “con Trujillo Morales, alcalde electo de Pantelhó traerá muchos muertos; por eso dijimos basta ya. Basta de tantos sufrimientos y derramamientos de sangre.
“Hoy, nuestro pueblo está dominado por el nuevo Goliat que son los narcotraficantes, sicarios, crimen organizado, pero nosotros somos los nuevos David que defiende a su pueblo, concluyeron.
Por otra parte, el sacerdote Marcelo Pérez Pérez, párroco de Simojovel, informó que ante la dificultad para desactivar los artefactos explosivos hallados en una casa del ejido Nuevo Israelita, de donde era originario el ex dirigente de la organización Las Abejas, Simón Pedro Pérez López, asesinado de un balazo el 5 de este mes, elementos del Ejército Mexicano los hicieron explotar con todos los protocolos, lo que provocó la destrucción total de tres viviendas y el baño de un templo.
Dijo que una de las casas destruidas era propiedad de las personas que elaboraron los artefactos, que salieron de la comunidad, y las otras que eran vecinas de Juan López Cruz y Feliciano López Pérez.