La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, dijo que la trata de personas sigue siendo uno de los problemas más graves de la comunidad internacional y del país. Su persistencia significa un menoscabo sumamente grave de los derechos humanos, señaló al dar a conocer que se trabaja en una norma oficial a fin de mejorar los albergues para víctimas de este delito.
En sesión de la Comisión Intersecretarial para Prevenir, Sancionar y Erradicar los Delitos en Materia de Trata de Personas y para la Protección y Asistencia a las Víctimas, la funcionaria agregó que a través del reforzamiento de las políticas públicas en la materia y la actuación diligente de todas las instituciones, es posible prevenir e investigar este crimen, sancionar a los responsables y proteger y garantizar los derechos de los afectados.
Ninguna acción, programa o diseño institucional podría arribar a un buen puerto sin el trabajo y la voluntad política para continuar emprendiendo acciones desde los estados y la Federación, añadió Sánchez Cordero.
En la reunión virtual, se aprobó el proyecto de fortalecimiento de albergues, refugios y casas de medio camino, la estrategia de difusión en torno a la conmemoración del Día Mundial contra la Trata de Personas y el convenio general de colaboración con el Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México.
Acompañada por el secretario técnico de la comisión, Félix Santana Ángeles, la secretaria de Gobernación explicó que el convenio ofrece la posibilidad de hacer uso de los datos que tiene el organismo, para tomar decisiones en políticas públicas.
En el contexto de la conmemoración del Día Mundial de la Trata de Personas, el 30 de julio, la ministra en retiro estimó que la difusión es fundamental para prevenir y concientizar sobre el problema.
Recordó que las organizaciones criminales recurren a diversas estrategias para captar jovencitas y someterlas a la trata de personas, como el enamoramiento, el embarazarlas y amenazarlas con quitarles a sus hijos para mantenerlas esclavizadas y el engaño con ofertas laborales.
Sobre los albergues, la funcionaria expuso que se trabaja en una norma oficial mexicana que permita al Estado hacer una vigilancia muy puntual de los sitios que brindan asistencia a las víctimas, ya que si bien existen algunos con excelente operación, hay otros que enfrentan deficiencias.