Buenos Aires. Llanto, la mirada al cielo y un grito desaforado de festejo ahogado durante 28 años fue la postal repetida la noche de este sábado en todos los rincones de Argentina, cuya selección se adueñó de la Copa América 2021 tras ganarle a Brasil 1-0.
Cuando el árbitro uruguayo Esteban Ostojich pitó el final del partido entre la albiceleste y su rival de todas las horas, y Lionel Messi se dejó caer de rodillas en el estadio Maracaná de Rio de Janeiro, millones de compatriotas quedaron tan abrumados por la emoción como él.
La selección argentina obtuvo su primer título desde 1993, pero incluso para los fanáticos más viscerales había un motivo reforzado para festejar: Messi, considerado por muchos el mejor jugador del mundo y tal vez de la historia, dueño de una zurda mágica y una habilidad arrolladora, al fin lograba ganar una Copa con la casaca de su país.
"¡Por fin, por fin!", gritó con un hilo de voz el comentarista argentino Juan Pablo Varsky en una transmisión televisiva, mientras en Buenos Aires miles olvidaron las restricciones del covid para salir a la calle y unirse entre gritos y abrazos.
Una multitud se reunió en los alrededores del icónico Obelisco capitalino, iluminado con los colores patrios y usual epicentro de celebraciones argentinas que no registraba aglomeraciones desde noviembre de 2020, cuando falleció el astro futbolístico Diego Maradona.
Al mismo tiempo, cientos de vehículos se volcaron a la avenida 9 de Julio, en dirección al centro porteño, entre bocinazos de festejo.
Las escenas de muchedumbres con banderas, abrazos y gritos de euforia se repetían en las principales ciudades del país, incluida Rosario, la cuna de Messi.
— Alegría 'en tiempos de dolor' -
"Quiero felicitar y abrazar a nuestro inmenso plantel por llevar al país a lo más alto", saludó el presidente argentino, Alberto Fernández, en su cuenta de Twitter.
"El pueblo argentino siempre recordará que, en tiempos de dolor, sembraron la ilusión y nos dieron una enorme alegría. ¡VAMOS ARGENTINA! Orgullo", agregó.
Las redes sociales fueron otro reducto para canalizar la euforia. El hashtag #Estoyllorando se convirtió rápidamente en tendencia, al igual que #Maradona, ya que miles aprovecharon el histórico triunfo para recordar al 10 eterno o incluso agradecerle una "ayuda" desde el más allá.
"Me encantó, nos vi presionando una banda (…) y me encantó ver a (Ángel) Di María hacer el gol, se lo re merecía", dijo a AFP Facundo Martínez, de 22 años, en el Patio de los Lecheros, un mercado de comidas en el barrio porteño de Caballito que pasó el encuentro por pantalla gigante.
El lugar contó con protocolos covid, aunque en los festejos callejeros el uso de mascarilla era bastante irregular, lo que ya enciende algunas alarmas sobre las consecuencias sanitarias en las próximas semanas.
El país de 45 millones de habitantes lleva aplicadas 24 millones de dosis de vacunas contra el nuevo coronavirus, pero solo 5 millones de personas cuentan con el esquema completo de vacunación.
Argentina registra 98 mil fallecimientos y 4,6 millones de infecciones, estadísticas que figuran entre las más altas de América.